Referendo por la paz | El Nuevo Siglo
Sábado, 23 de Agosto de 2014

Cómo pasa el tiempo. Hace un año los partidos que integran la coalición de Unidad Nacional radicaron en el Congreso, con mensaje de urgencia a bordo, un proyecto de ley estatutaria que proponía refrendar el día de elecciones posibles acuerdos con la guerrilla. La iniciativa había sido anunciada por el presidente Santos con anterioridad e incluso se invitó a partidos de oposición como el Polo a que la respaldaran. El proyecto de inmediato generó ampollas en el uribismo y otros sectores críticos del Gobierno pues se pensaba, entonces, que lo que la Casa de Nariño estaba buscando era atar el referendo por la paz a las elecciones presidenciales, sabido entonces que la posibilidad de que Santos se lanzara a la reelección eran altas, pese a la descolgada en las encuestas producto del paro agrario.

 

Oposición uribista

Como se sabe, hasta el momento los referendos no se pueden votar el mismo día de otra elección ordinaria, como las parlamentarias o la misma presidencial. De allí que los uribistas de inmediato se opusieran al cambio de las reglas del juego, más aún cuando a mediados del año pasado se pensaba que el proceso de negociación con las Farc podía terminar en diciembre y, aunque los tiempos eran apretados, había alguna posibilidad de que el referendo para que la ciudadanía votará Sí o No a lo pactado con las Farc se hiciera el mismo día de la primera o la segunda vuelta presidencial, dándole una ventaja muy alta a la campaña reeleccionista puesto que las encuestas evidenciaban un alto apoyo al proceso.

 

Optimismo presidencial   

Es más, hace un año los uribistas hicieron eco, para sustentar su oposición a la iniciativa, a las propias palabras de Santos cuando hizo el anuncio respectivo: “el proceso de paz avanza. Las conversaciones en La Habana avanzan. Y tenemos la responsabilidad, la obligación de prever cualquier instancia que sea necesaria si los acuerdos se formalizan, para que el pueblo colombiano, como lo hemos venido reiterando en todos los escenarios, sea quien tome la última palabra, quien decida si esos acuerdos a que lleguemos son aceptables o no”.

 

Sin problemas 

Lo cierto es que la coalición parlamentaria gobiernista sacó adelante la iniciativa sin mayores problemas y ya en noviembre estaba aprobada y pasó a control previo de la Corte Constitucional, debido a que se trataba de una ley de carácter estatutario. Hasta el momento el máximo tribunal no ha expedido el respecto fallo sobre el control de exequibilidad. Lo que sí ocurrió fue que en junio pasado la Procuraduría emitió su respectivo concepto pidiéndole a la Corte que declarara inexequible la ley debido a que tenía vicios de forma y fondo.

 

No pero sí  

Se presume que en pocas semanas la Corte Constitucional dará su veredicto final, aunque ya la norma no es tan necesaria, toda vez que la próxima elección ordinaria se dará en octubre del próximo año, cuando se deben realizar los comicios para escoger gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles. Aún así es claro que de ser avalada por la Corte este fallo sobre la ley estatutaria para el referendo por la paz se convertiría en un espaldarazo jurisprudencial más al proceso para una salida negociada al conflicto.