Si bien es cierto que el viernes pasado el Polo erigió a la exalcaldesa de Bogotá, Clara López, como candidata presidencial para 2014, luego de que el senador Jorge Enrique Robledo declinara una posible aspiración suya, lo cierto es que en las toldas amarillas se insiste en que el congresista, que está catalogado en varias encuestas como el mejor parlamentario del momento, debería ser la fórmula vicepresidencial de la exsecretaria de Gobierno del exalcalde Samuel Moreno.
Cero y van dos
No es la primera vez que López hace parte de una contienda presidencial. Hay que recordar que en la campaña de 2010 ella era la fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro. Su escogencia se dio como una medida político-electoral para unir las dos vertientes de la colectividad y tratar de sanar las heridas dejadas por la consulta interna citada para escoger candidato presidencial. Sin embargo, tras los comicios, el exsenador decidió armar toldo aparte, mientras que López asumió la jefatura del Polo luego de entregarle las llaves del Palacio Liévano a su exfórmula en las presidenciales de 2010.
¿A la Alcaldía?
Ahora, no necesariamente el hecho de que López sea la aspirante presidencial en dos años implica que su nombre queda descartado como una carta fuerte del Polo para recuperar la Alcaldía de Bogotá en los comicios de octubre de 2015. Si López no saliera elegida para la Casa de Nariño quedaría en el partidor para competir un año y medio después por la sucesión del propio Petro, aunque el viernes pasado algunos dirigentes sostenían que Robledo podría ser una opción muy interesante para que el partido de las banderas amarillas volviera a mandar en la capital, como lo hicieron Lucho Garzón y Samuel Moreno, el primero hoy presidente de los Verdes y el segundo preso y en proceso de juicio.
Temor paisa
Al Congreso serán citados el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, los comandantes de las Fuerzas Militares y la Policía, así como el Consejero Presidencial para la Seguridad Ciudadana, Francisco Lloreda, para que le expliquen a la plenaria cómo se piensa reforzar la lucha contra las Bacrim. La bancada antioqueña está muy preocupada por lo que está ocurriendo en su departamento que fue escenario la semana pasada de una masacre de 10 campesinos y el propio gobernador, Sergio Fajardo, no dudó en advertir que la guerra entre “Urabeños” y “Rastrojos” amenazaba con desatar una tragedia de grandes proporciones en la zona.
Presión
Como lo informó la semana pasada EL NUEVO SIGLO no es nada remota la posibilidad de que el Congreso sea citado a sesiones extras para terminar de discutir varios proyectos clave de la agenda legislativa. Al ser consultado sobre esta eventualidad, uno de los senadores más veteranos indicó que “… no hay necesidad de llamar a extras porque los tiempos dan todavía para sacar adelante las principales iniciativas… Lo que pasa es que se pone a rodar el rumor para meterles presión a los congresistas pero al
Cita azul
“… El Partido, en definitiva, debería hacer propia la sentencia garcíamarquiana de buscar en las estirpes olvidadas una segunda oportunidad sobre la tierra”. Esa fueron las palabras con las que el senador Roberto Gerlein cerró su discurso en el homenaje de la semana pasada rendido por el Partido Conservador. La cita hacía referencia a que la colectividad debía recobrar su vocación de poder y renovar vetustas costumbres.