Algunos congresistas se han quejado de que a la Iglesia Católica le falta más dinamismo para hacer valer sus tesis durante los debates a los proyectos de ley y acto legislativo que, de ser aprobados, podrían afectar el ideario de esa doctrina religiosa. Como se sabe en estos momentos hacen trámite en el Legislativo la reglamentación de la eutanasia, el procedimiento para abortos en los tres casos despenalizados y hay varias iniciativas sobre derechos de las parejas del mismo sexo.

¿Y la Iglesia? (II)

“… Si bien Colombia es un Estado laico y la Carta Política es amplia en cuanto al derecho a la igualdad, la libre autodeterminación y la libertad de cultos, es claro que los voceros de la Iglesia tienen un peso específico entre la sociedad y, por lo tanto, si vienen al Congreso no sólo están defendiendo el pensamiento doctrinario de la Iglesia sino hablando en representación de millones de personas que, si bien son mayorías, tienen los mismos derechos de las minorías…”, precisó un senador, que habló a condición de mantener su identidad en reserva.

Lío de fondo

En los pasillos del Congreso se dice que el tono de pelea regional y personal que tomó la polémica entre el presidente del Senado, Roy Barreras, y el vicepresidente Angelino Garzón, fue el que dio al traste con la posibilidad de que se tomaran medidas desde el Legislativo para obligar al segundo a bordo de la Casa de Nariño a realizarse un examen médico que permita establecer su verdadero estado de salud y si está en condiciones de reemplazar al Jefe de Estado en caso de ausencia temporal o definitiva de éste. 

‘Cuero’ tributario

Uno de los senadores más veteranos en las comisiones económicas fue interrogado por un periodista de EL NUEVO SIGLO en torno de cómo veía el panorama para el proyecto de reforma tributaria. “… Esa es la pregunta que más me han hecho en los últimos años y mi respuesta siempre es la misma: las tributarias son como las chaquetas de cuero, por más que usted les dé vueltas y uso, siempre sobreviven…”.

Socialización

Por ahora se sabe que el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, y el director de la DIAN, Juan Ricardo Ortega, comenzarán en próximos días reuniones con las bancadas parlamentarias para explicar la iniciativa y buscar apoyos. Es obvio que el Gobierno confía en que la coalición de la Unidad Nacional imponga el ritmo de los debates a la iniciativa -que llegó con mensaje de urgencia- y lo lleve a una aprobación rápida y sin contratiempos.

El detallito

Y hablando de este proyecto, durante una reunión que hubo el pasado miércoles entre Cárdenas, Ortega y los directores y altos cargos de los principales medios de comunicación en la capital del país, el zar de las finanzas dejó en claro que la idea es sacar el proyecto lo más intacto posible, evitando el riesgo de que los senadores y representantes le empiecen a colgar un sinnúmero de artículos. Aunque todos los ministros de Hacienda suelen decir lo mismo, Cárdenas explicó que la situación con esta iniciativa es distinta, puesto que, a diferencia de otros gobiernos y proyectos, la economía del país va bien y no hay urgencias fiscales ni de recaudo, que hagan obligatoria la aprobación de la iniciativa, por más reformas que le hagan en el Legislativo.