Los casos nuevos en Latinoamérica de infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), causante del sida, aumentaron un 21% en la última década, pasando de unos 100.000 en 2010 a unos 120.000 en 2019, reveló el lunes la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
En el mismo período, el número de muertes anuales relacionadas con el sida ha descendido levemente, al pasar de 41.000 en 2010 a 37.000 en 2019, dijo la OPS, oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Estos datos señalan que sin duda la infección por el VIH todavía representa un grave problema de salud pública en América Latina", afirmó la directora de la OPS, Carissa Etienne, indicando que "se prevé que el covid-19 exacerbe esta situación" dado el impacto del nuevo coronavirus en los servicios de salud.
Desde que se declaró la pandemia mundial a mediados de marzo, la cantidad de personas que se han realizado la prueba para detectar la infección por el VIH disminuyó "drásticamente", tanto en el Caribe como en Latinoamérica, dijo la OPS en un comunicado.
En el primer semestre de 2020, en ocho países latinoamericanos y caribeños - Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Perú, República Dominicana y Santa Lucía - se realizaron unos 4.000 diagnósticos menos de infección por el VIH que en el mismo periodo de 2019, según cifras oficiales.
Sin diagnóstico, los infectados de VIH no tienen acceso a los antirretrovirales que pueden salvarles la vida y además corren riesgo de contagiar a otras personas.
Unos 2,1 millones de personas en América Latina y 330.000 en el Caribe vivían con VIH en 2019, según cifras de ONUSIDA, la agencia de la ONU para lucha contra el sida.