La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, ANLA, en el marco de su estrategia de fortalecimiento institucional, y mediante la generación de agendas con diferentes actores del estado colombiano, ha firmado con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística – DANE, un convenio interadministrativo que le permitirá a la entidad contar con una metodología para fortalecer los procesos de evaluación y seguimiento de licencias, permisos y trámites ambientales en diferentes aspectos técnicos, sociales y económicos, que contribuirán a la mejora continua de sus procesos en materia de calidad técnica en las decisiones y criterios socioeconómicos, así como también en el marco de las acciones de prevención del daño antijurídico de la entidad.
Dentro de las líneas de acción que se enmarcan en este convenio, se encuentran el desarrollo de metodologías para la elaboración de censos socioeconómicos y demográficos de la población objeto de reasentamiento. Igualmente, contempla la implementación de un plan de fortalecimiento de operaciones estadísticas que gestiona la ANLA con el objetivo de optimizar el uso y análisis de los datos con que cuenta la ANLA en relación con el desempeño ambiental de sus usuarios. Por último, la gestión de intercambio de información entre las entidades a través de transferencia del conocimiento, que fortalecerá los procesos competencia de la entidad.
Según Rodrigo Suárez Castaño, director general de la ANLA, “con la celebración de este convenio podremos contrastar la información socioeconómica y demográfica donde se desarrollan los proyectos, lo que robustecerá el marco del licenciamiento ambiental. El acompañamiento del DANE en la construcción de metodologías para la obtención de información nos brindará herramientas que nos permitirán complementar los conceptos técnicos emitidos por esta Autoridad, fortaleciendo el proceso de evaluación ambiental”.
Adicionalmente, con estos convenios se podrán elaborar metodologías y estudios, tener acompañamiento técnico y tecnológico, realizar mesas de trabajo e intercambiar información, lo cual fortalecerá la capacidad institucional de ambas entidades y que, además, favorecerá la conservación el medio ambiente gracias a la capacidad de generar conceptos ambientales con más variables técnicas y consistentes.