Los platos de icopor y plástico se demoran entre 1.000 y 200.000 años en degradarse, mientras que los de hoja de plátano se podrían almacenar durante seis meses o un año, según las condiciones, y después de usarlos se degradarían en cerca de 28 días.
Alrededor del 40% de los plásticos son desechables y se disponen de manera inadecuada. El proyecto aprovecha tanto el material como el potencial de la producción platanera de Antioquia, en el que solo se aprovecha en un 30% de la planta.
Los datos corresponden a una investigación del Seminario de Proyectos II, realizada por Diana Camila Arroyave, estudiante de Ingeniería Civil de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional de Colombia (UN) Sede Medellín, y otros ocho alumnos. Ella afirma que estos platos se utilizan hace unos 5.000 años en India y Tailandia, por ejemplo.
Con esta materia prima se fabricó un prototipo de platos ecológicos que se espera escalar industrialmente para contribuir a solucionar el problema ambiental que se genera con los residuos plásticos.
Santiago Carmona Giraldo, también investigador y estudiante de Ingeniería Civil, asegura que se propuso que la vida útil del producto sea de ocho años y la inversión inicial de 32 millones de pesos. En su opinión, se trata de una idea financieramente viable: “se hizo un estudio de sensibilidad, según el cual la posibilidad de que el proyecto se adopte es de cerca del 65 %”. Se espera que inicialmente sea financiado en un 60% por un préstamo bancario.
María José Giraldo Jaramillo, estudiante de Ingeniería Eléctrica, expone que eventualmente cada 15 días se recibirán 3.000 hojas de plátano de una plantación en Amagá, municipio del suroeste antioqueño.
El proceso sería el siguiente: se seleccionan las hojas que estén en buenas condiciones, se lavan con agua, se les quita la nervadura y se cortan en láminas de 30 cm2. En seguida se desinfectan y se pegan con almidón de yuca a cartón biodegradable, para darle más rigidez al plato.
Por último pasan a secado en un horno; de ahí se prensan para darles la firmeza y rigidez necesaria; aquí se les agrega un conservante para que duren más tiempo almacenados, y se empacan.
Novedosos y más baratos
Los platos de hojas de plátano se venderían en paquetes de 35 unidades. Los cálculos aproximados del precio se hicieron por 775 pesos la unidad, más baratos que los platos desechables biodegradables del mercado, que cuestan entre 800 y 900 pesos.
Sin embargo, “como sería un producto novedoso y no tan económico como los platos plásticos, inicialmente no se pensaría ofrecerlos a las piñaterías sino a restaurantes vegetarianos o con concepto orgánico que quieran dar valor agregado al servir sus productos”, afirma la estudiante Giraldo.
Los estudiantes también planean entregarlos en la entrada de los parques naturales, donde se prohíbe la entrada de desechables porque no se hace buena disposición de basuras.
“Los platos a base de hoja de plátano no representarían contaminación visual ni ambiental”, concluye.