Seis desafíos ambientales de las ciudades en Colombia | El Nuevo Siglo
Greenpeace
Lunes, 31 de Octubre de 2022
Redacción Medio Ambiente

Más del 77% de la población de Colombia vive en áreas metropolitanas y Bogotá alberga al 22% de los colombianos, según Greenpeace. Señala que “el aumento de la población y que más personas se trasladen a las ciudades hace que los alcaldes y autoridades gubernamentales se encuentren con mayores desafíos ambientales”.

Agrega que, de hecho, un informe de las Naciones Unidas, indica que la región Latinoamérica en general durante la próxima década será altamente vulnerable a los efectos del cambio climático.

En cuanto a Colombia, la organización ambientalista alertó que ciudades costeras como por ejemplo Barranquilla, Santa Marta y San Andrés están en riesgo por huracanes, tormentas y temporales, así como las ciudades ubicadas en las montañas como la Cordillera de los Andes, estarán en riesgo por inundaciones y deslizamientos, como es el caso de Bogotá y Medellín.

Además, señaló que existe un déficit en la implementación de políticas públicas y programas que impulsen la conservación de espacios verdes, la reducción de las emisiones de efecto invernadero, movilidad baja en emisiones y gestión integral de los residuos.

En este contexto, la ONG plantea seis desafíos que deberían enfrentar las ciudades en Colombia:

1. Manejo adecuado de residuos: En Colombia se producen alrededor de 25.000 toneladas de residuos sólidos al día, de los cuáles únicamente se recuperan y reintegran en el ciclo productivo el 13%, una cifra muy baja si se tiene en cuenta el alto potencial de separación para el reciclaje que existe. Los rellenos sanitarios están llegando a su punto límite. La crisis en la gestión de residuos y la contaminación plástica es un reflejo de nuestros estilos de vida insostenibles. Estamos consumiendo y produciendo a un ritmo que aturde la mente. Lograr cambios a corto plazo en aspectos de la gestión de residuos será lo más determinante para la reconstrucción de nuestra ciudad.

2. Mejora de la calidad del aire: El 77% de los colombianos vive en ciudades y es el mismo lugar en donde se generan la mayor cantidad de emisiones causantes del cambio climático. Mayores fuentes contaminantes, mayores emisiones por quemas de combustibles hace que estemos en riesgo permanente de respirar aire sucio y contaminado. Actualmente es el mayor riesgo ambiental para la salud humana y una de las principales causas de muerte y enfermedades en todo el mundo. Colombia debe comprometerse a mejorar la calidad del aire. La combinación de estrategias dirigidas hacia los mayores emisores de partículas finas (PM2.5), incluida la reducción del uso de vehículos privados, los controles de fuentes industriales, las flotas de vehículos de baja y cero emisiones y los sistemas de limpieza vial ayudarán a lograr una buena calidad del aire a corto y largo plazo.

3. Aumento y protección de espacios verdes: Las áreas verdes de las ciudades cuentan con una serie de servicios ecosistémicos de provisión, regulación, soporte, e incluso de valoración cultural. Cuando los bosques, humedales, y demás áreas públicas verdes no son valorados, son cada vez más susceptibles a las presiones de desarrollo, cambio del uso del suelo y riesgo de desaparecer. Espacios como el Parque del Río en Medellín, los cerros orientales de Bogotá; el parque del agua en Bucaramanga, los jardines Botánicos de Barranquilla y Bogotá, se convierten en núcleos de biodiversidad, conectividad, ayudan a mitigar la contaminación del aire, capturan y almacenan carbono, regulan el ciclo del agua y microclima, proporciona hábitat y alimento para la vida silvestre, y representa una importante aportación paisajística. La protección y ampliación de estos espacios es fundamental para las ciudades sustentables y la mejora en la calidad de vida de la ciudadanía.



4. Seguridad y soberanía alimentaria: Tiene que ver con la disponibilidad tanto cuantitativa como cualitativa de alimentos para las personas. La producción, disponibilidad y accesibilidad, asepsia a cualquier tipo de alimento puesto que es un derecho humano. En Colombia se identifican algunas problemáticas en este aspecto: el desconocimiento de los productos locales o nativos, los desperdicios de la alimentación, de donde provienen los productos que consumimos en las ciudades, el impacto de los monocultivos en nuestro planeta entre otros. Promover la agricultura comunitaria local producida en su gran mayoría por nuestros campesinos y familias, las huertas urbanas, dietas que se basen en frutas y verduras de temporada, son algunas de las estrategias para asegurar la seguridad y soberanía alimentaria.

5. Consumo responsable de bienes y servicios: El consumo es una de las principales causas del 60% de todas las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Todo lo que consumimos, compramos y adquirimos tiene un impacto en el ambiente, es lo que llamamos huella de carbono

6. Movilidad sustentable: En Colombia más del 78% de las emisiones causantes del cambio climático provienen de los más de 15 millones vehículos que transitan entre camiones, buses, carros y motos. Colombia es el segundo país a nivel mundial con el peor tráfico y con un puntaje bastante preocupante de calidad vial de 3.4 sobre 7. Adicionalmente los vehículos que circulan en el territorio colombiano tienen un promedio de edad de 17.2 años a cierre de 2020, es decir, vehículos cada vez más obsoletos y sin maquinaria que ayuden a proteger el medio ambiente. Ciudades capaces de luchar y resolver las situaciones de movilidad asegurando un transporte público sustentable, seguro y limpio con agilidad en la mejora de la malla vial, obras de adecuación del metro, aumentó en carriles para bicicletas y medios de transporte alternativo.

EN BOGOTÁ, los cerros orientales ayudan a mitigar la contaminación del aire, capturan y almacenan carbono y regulan el ciclo del agua./Greenpeace