Como medida para mitigar el impacto en temporadas de sequía, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), inició la construcción del Banco Municipal de Agua (BAMA) más grande del país, con capacidad para almacenar más de 58 mil metros cúbicos de agua, lo equivalente aproximado a 17 piscinas olímpicas.
Esta estructura, que será construida en el municipio de Simijaca (Cundinamarca), beneficiará a más de 980 mil campesinos de la zona rural, al proveerlos de una fuente de agua que podrán usar para el riego de sus cultivos durante los meses de sequía. Su puesta en marcha, de acuerdo con la entidad, se estima para marzo de 2023.
Elkin Villamil, director de Infraestructura Ambiental de la CAR, explicó que el BAMA almacena las aguas de ríos, quebradas y otras fuentes hídricas cuando aumentan sus niveles a causa de las abundantes lluvias.
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“Además de aprovechar el agua almacenada, especialmente en épocas de sequía, permite regular los niveles de los ríos y quebradas al evitar desbordamientos y desastres”, dijo el funcionario.
Villamil destacó que como este BAMA, la CAR construye otros 6 bancos de agua en los municipios de Caldas, Chiquinquirá y Saboyá en el departamento de Boyacá y Nocaima, Sasaima, y Guayabal de Síquima en Cundinamarca, que benefician a más de 7.500 campesinos, al almacenar en total unos 136 mil metros cúbicos de agua, lo equivalente a más de 40 piscinas olímpicas.
De esta manera, la CAR Cundinamarca ya ha puesto en funcionamiento 12 BAMAS en municipios como Guachetá, Jerusalén, Granada, Pasca, Caparrapí y Tibacuy, con los que beneficia a más de 19 mil campesinos que hoy cuentan con una fuente de riego para sus cultivos.