El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el martes que hay "cero" posibilidad de que su gobierno lo obligue a dejar el cargo invocando la 25ª Enmienda de la Constitución.
"La 25ª Enmienda es de cero riesgo para mí", dijo Trump en Alamo, Texas, en alusión a la presión de los demócratas sobre el vicepresidente Mike Pence para que, con apoyo del gabinete, el mandatario sea apartado del poder por considerarlo no apto para ejercer el cargo.
Juicio político en su contra despierta "una inmensa ira"
El presidente Donald Trump consideró el martes que el procedimiento de juicio político en su contra es "absolutamente ridículo" y afirmó que despertó "una inmensa ira" en todo Estados Unidos, antes de volar a Texas para su primera salida desde la toma del Capitolio.
"Esta es realmente la continuación de la mayor cacería de brujas de la historia. Es ridículo, es absolutamente ridículo. Este 'impeachment' está causando una ira inmensa", dijo el presidente estadounidense desde los jardines de la Casa Blanca.
"No quiero violencia", agregó en su primera declaración a la prensa desde la asonada del 6 de enero, que dejó cinco muertos y conmocionó a Estados Unidos y al mundo.
Cuando restan ocho días para que deje el poder, el mandatario republicano adoptó un tono combativo, asegurando que su discurso ante sus partidarios antes del asalto al Capitolio fue "totalmente apropiado", y denunciando el "error catastrófico" de las redes sociales, como Twitter y Facebook, al suspenderle su cuenta acusándolo de incitar a la violencia.
En plena tormenta política, el presidente se reunió el lunes con su vicepresidente, Mike Pence, quien -según parece- ha decidido hacer frente común con el mandatario ante los demócratas, rechazando los pedidos para que aparte a Trump del poder invocando la 25ª Enmienda de la Constitución.
En el Congreso se está preparando además un procedimiento de "impeachment" que pasaría a la historia y es probable que hipoteque el posible futuro político de Trump, quien podría convertirse en el primer presidente de Estados Unidos en ser acusado dos veces en un juicio político.
La Cámara de Representantes considerará la acusación el miércoles y se espera que la vote ese mismo día.
La Casa Blanca dijo que Trump viaja a Alamo, Texas, para "marcar la finalización de más de 400 millas (640 km) de muro fronterizo", lo cual consideró una "promesa cumplida", y para "resaltar los esfuerzos de su gobierno para reformar un sistema de inmigración disfuncional".
Sin embargo, se está muy lejos del "gran, magnífico" muro prometido por Trump en la campaña electoral de 2016.
Del total finalizado, solo unos 20 km han sido construidos en zonas en las que antes no existía ninguna barrera física. El resto corresponde a mejoras o refuerzos de barreras existentes.
Y México nunca pagó por el muro, como había prometido Trump.
- Segundo "impeachment" -
Con el respaldo de una gran cantidad de demócratas, y con el posible apoyo de republicanos, se espera que la acusación contra Trump se apruebe fácilmente el miércoles.
El presidente estadounidense ya fue sometido a un "impeachment", cuando la Cámara de Representantes lo acusó en diciembre de 2019 de presionar al mandatario ucraniano para que investigara por presunta corrupción a Joe Biden, actual presidente electo y quien entonces aparecía como su principal rival político. Trump fue finalmente absuelto por el Senado de mayoría republicana.
Tras una eventual nueva acusación de la Cámara Baja, queda la duda sobre el rumbo y el desenlace del juicio que luego tendrá que celebrarse en el Senado, actualmente con mayoría republicana.
Los demócratas tomarán el control de la Cámara Alta el 20 de enero, pero necesitarán el apoyo de muchos republicanos para lograr la mayoría de dos tercios necesaria para condenar al presidente.
Un juicio político a Trump también correría el riesgo de obstaculizar la acción legislativa de los demócratas al comienzo de la presidencia de Biden, al monopolizar las sesiones del Senado.
Al mismo tiempo, los demócratas quieren aprobar una resolución el martes por la noche pidiendo al vicepresidente Pence que destituya al presidente de su cargo.
Mientras no lo saquen del poder, la "complicidad" de los republicanos con Trump, "pondrá en peligro a Estados Unidos", advirtió el lunes la poderosa presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Biden prestará juramento bajo un gran dispositivo de seguridad el 20 de enero, justo en las escaleras del Capitolio, sede del Congreso de Estados Unidos.
Criticado por su demora en enviar a la Guardia Nacional el miércoles pasado, el Pentágono autorizó el despliegue de 15.000 soldados para la ceremonia de investidura.
"No tengo miedo", aseguró Biden el lunes sobre los riesgos de nuevas manifestaciones pro-Trump.
El presidente electo llamó a enjuiciar a todos los implicados en los actos de "insurrección" del miércoles pasado.
Biden tiene grandes retos por delante: enfrentará una pandemia de covid-19 descontrolada, un caótico programa de vacunación, una economía inestable y ahora las secuelas de la violenta oposición política de buena parte de la enorme base de votantes de Trump.