John Marulanda fue militar y hoy es un académico experto en temas de defensa y seguridad nacional, consultor y reconocido columnista de varios medios. En diálogo con EL NUEVO SIGLO analiza la situación actual del Eln.
EL NUEVO SIGLO: Se ha hablado de la posibilidad de un atentado terrorista del Eln en Bogotá. ¿Usted qué piensa?
JOHN MARULANDA: El Eln tiene la capacidad de hacerlo, así lo ha probado en el pasado. Recuerde los atentados al Andino, a la General Santander, su participación en las marchas de 2019, tiene infiltrados en las universidades, etc. De modo que esa posibilidad es real, es un riesgo que hasta el momento las fuerzas de seguridad están en capacidad de abortar.
ENS: ¿Esa capacidad del Eln es la que tiene a esa guerrilla en la agenda noticiosa?
JM: Yo creo que lo del Eln está articulado a una estrategia más grande que comprende varios frentes: la amenaza de muerte al presidente Duque por parte de las Farc, las agresiones tan violentas del general Vladimir Padrino (ministro de la Defensa de Venezuela) que fueron unas horas antes, y poco antes se había dado la última arremetida del dictador Maduro. Todo eso sucedió en menos de cuatro días, y todo eso está sazonado con la carta del embajador de Cuba advirtiendo de un atentado terrorista del Eln en Bogotá y luego de que la Inteligencia detectara un movimiento de explosivistas del Eln desde Arauca a Bogotá. Todo eso da cuenta de una sola componenda.
ENS: ¿Y quién está detrás de esa componenda?
JM: A mi modo de ver es una estrategia que ha sido diseñada por el Foro de Sao Paulo, implementada por el Grupo de Puebla y animada por Venezuela. No se puede desarticular el Eln de esos tres grupos y del narcotráfico. Esa componenda lo que busca es desestabilizar a Colombia.
ENS: ¿Cómo ve la situación diplomática con Cuba por cuenta de la negativa de ese país de extraditar a los jefes del Eln que permanecen allá?
JM: Yo veo un Gobierno colombiano muy firme, muy fuerte en su posición, manteniendo una solicitud diplomática y policial de la extradición de los asesinos confesos del atentado a la Escuela General Santander, pero también veo el asedio de los quintacolumnistas del Eln y de los amigos de Cuba pidiéndole al Gobierno que inicie un diálogo con el Eln con la intención de que eso ayude a que los Estados Unidos saquen a Cuba de la lista de países que apoyan el terrorismo, esperanza que guardan con Joe Biden para que, de paso, inicie un acercamiento con Venezuela. Todo eso forma parte de la misma estrategia.
ENS: ¿Y quiénes son esos ‘quintacolumnistas’?
JM: Son muchos: ahí están el expresidente Ernesto Samper, el expresidente Juan Manuel Santos, el ‘filosofastro de la paz’ Sergio Jaramillo, Francisco de Roux, los monseñores de la Teología de la Liberación, varios articulistas, están pidiendo para que el presidente Duque se abra a una mesa de diálogo con el Eln.
ENS: ¿Entonces, en su opinión, qué debe hacer el Gobierno?
JM: El gobierno del presidente Duque debe mantenerse en su posición, exigirle a Cuba que extradite a los cabecillas del Eln; debe realizar operaciones militares exitosas para quebrar la voluntad de lucha de las Farc y del Eln y ahí sí llamarlos a una mesa de negociación.
ENS: Bueno, pero Cuba ya dijo que no los va a extraditar…
JM: Por eso es importante que se mantenga la posición del Gobierno colombiano y que no vaya a ceder. Es más, yo creería que en este momento sería un golpe muy duro para Cuba, para Venezuela, para el Grupo de Puebla y para todos, que Colombia rompa relaciones diplomáticas con Cuba. En realidad no hay motivos, fuera de los políticos, para mantener relaciones con Cuba: no hay comercio de ningún tipo, no hay un intercambio fluido.
Colombia históricamente no le debe nada a Cuba como no sea el nacimiento del Eln, el entrenamiento del M-19, la protección del grupo narcoterrorista del Eln, de modo que romper relaciones con Cuba sería un golpe contundente en contra de toda esta estrategia que se está desarrollando.
En beneficio de la seguridad nacional, hay que romper relaciones con Cuba ya.
ENS: Pero ahí sí que menos los van a extraditar y se entierra toda posibilidad de negociación de paz…
JM: Romper relaciones con Cuba está dentro de la línea de acción del Gobierno de negar la legitimidad de la dictadura venezolana, que es precisamente el que está protegiendo y fortaleciendo al Eln. Esa sería una carambola a tres bandas muy interesante, y se buscaría otro país como sede de negociaciones.