Si bien el fiscal Gabriel Jaimes Durán radicará este viernes ante el Complejo Judicial de Paloquemao la solicitud de audiencia para pedir la preclusión del proceso que se sigue contra el exsenador Álvaro Uribe Vélez, no significa que el caso esté cerca de terminar.
Por el contrario, apenas se cierra una de las etapas procesales como es el cierre de la etapa de instrucción, ahora deberá –una vez se defina la fecha de la audiencia- sustentar jurídicamente sus argumentos de preclusión.
Obviamente, estos podrán ser rebatidos por las víctimas –el senador Iván Cepeda, el exfiscal Eduard Montealegre y el exvicefiscal Jorge Perdomo- a través de sus apoderados, y por el agente del Ministerio Público.
Escuchadas las partes, el juez de Conocimiento que por reparto conozca del proceso puede decidir si acepta la reclusión o si la rechaza para que se inicie el juicio al exsenador. Cualquiera sea su decisión, puede ser apelada ante el Tribunal Superior de Bogotá que, también por reparto, integra una sala de tres magistrados quienes se pronunciarán de fondo.
Incluso, la decisión de la sala de revisión puede ser impugnada ante la Corte Suprema de Justicia, donde ahí sí, se podría hablar de un fallo final, si es que este no es impugnado vía tutela, caso en el cual la última palabra quedará en manos de la Corte Constitucional.
Es decir, que una decisión final sobre el caso Uribe todavía está a meses de conocerse.