Después de que el pasado lunes se anunciara por el Ejército que en un enfrentamiento en el Putumayo de una brigada antinarcóticos y la columna 48 de las disidencias de las Farc, en zona rural de Puerto Leguízamo, fueron abatidos 11 irregulares, ayer organizaciones de este departamento aseguraron que al menos 7 de quienes perdieron la vida eran civiles y no subversivos.
La Red de Derechos Humanos del Putumayo y la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana (Opiac) denunciaron que entre los 11 muertos que dio cuenta el Ejército están Didier Hernández Rojas, presidente de la Junta de Acción Comunal de la Vereda Remanso; Ana María Sarria Barrera, esposa del presidente de la Junta; Brayan Santiago Pama, un menor de edad de 16 años y Pablo Panduro Coquinche, Gobernador del Cabildo Kichwa.
Agregan que también entre las personas muertas y presentadas por el Ejército como abatidas en combate, estaría el civil Oscar Olivo Yela y otras dos conocidas como ‘Pequeño’ y ‘Cuéllar’, habitantes de la zona.
La Red de Derechos Humanos del Putumayo señaló que la comunidad en la zona donde se presentó el operativo militar denunció que hay cuerpos desaparecidos y también se produjo el desplazamiento de los habitantes de la vereda Alto Remanso.
Por su parte la Opiac pidió al Ministerio de Defensa "que se retracte de sus declaraciones y aclare” que las personas muertas “no eran guerrilleros sino población civil”.
De igual forma, esta organización indígena solicitó a la Fiscalía General de la Nación que investigue las condiciones reales en las que ocurrió la muerte de estos ciudadanos.
Las operaciones militares especiales en la zona tienen como misión atacar las finanzas de alias ‘Bruno’, uno de los más importantes cabecillas de las disidencias de las Farc.
Sobre esto el presidente Duque trinó que “continua la ofensiva contra estructuras terroristas en todas las regiones del país. En operaciones de nuestra fuerza pública, se logró la neutralización de 11 integrantes de disidencias de las Farc y la captura de 4 criminales más en Puerto Leguízamo (Putumayo)”.
De acuerdo con información de las autoridades, el grupo disidente no solo se dedicaba a actividades ilegales en el departamento, sino que también sembraba el terror en la región a través de intimidación a habitantes y comerciantes.