Déficit de cuenta corriente llegaría al 3,6% del PIB este año | El Nuevo Siglo
EL INCREMENTO de las importaciones este año aumentaría el déficit de la cuenta corriente./ENS
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Domingo, 11 de Abril de 2021
Redacción Economía

El déficit en la cuenta corriente del país se ampliaría a 3,6% del Producto Interno Bruto (PIB), resultado de una recuperación paulatina de la economía colombiana y pese a la reversión esperada del choque externo de los términos de intercambio y de la mayor demanda externa proyectada.

Así lo señala el Banco de la República en su informe de política monetaria al Congreso. En particular, el repunte previsto para la demanda interna induciría el crecimiento de las importaciones, así como el de las utilidades de las empresas con capital extranjero en el mercado local.

Adicionalmente, los mayores precios proyectados para algunos bienes básicos, incrementarían las ganancias de las firmas con participación extranjera que exportan esos productos. Estos factores serían los principales determinantes de la ampliación del déficit durante el año, sin embargo, serían contrarrestados parcialmente por los efectos de unos términos de intercambio más altos y de la recuperación de los socios comerciales del país.

Así, el incremento en los ingresos externos corrientes durante 2021 se explicaría por mayores exportaciones tanto de los principales productos básicos como de bienes industriales. A estas dinámicas se agregaría un buen comportamiento esperado para las remesas debido a la naturaleza contracíclica de estos recursos y a que el ingreso de los migrantes podría continuar beneficiándose de los estímulos fiscales en algunos de sus países de residencia.

Proyección

De otro lado, el Emisor resalta que la proyección del déficit de la cuenta corriente para 2021 presenta alta incertidumbre, por lo que la estimación del equipo técnico del Banco se encuentra dentro de un intervalo de pronóstico amplio (entre el -5% y -2% del PIB).

A pesar del incremento esperado del déficit corriente, coherente con la reactivación proyectada de la economía, el acceso permanente al financiamiento y una posición externa más sólida, reducen la vulnerabilidad del país.

Se prevé que durante 2021 continúe la amplia liquidez y las bajas tasas de interés globales, lo cual aportaría a que el país acceda plenamente a diferentes fuentes de financiamiento externo. Al tiempo, la recuperación económica local e internacional propiciaría un incremento en las entradas por Inversión Extranjera Directa (IED) que, junto con los recursos asociados al sector público, contribuirían a la financiación del déficit de la cuenta corriente.

Indica la institución que “el incremento de las reservas internacionales en 2020, el acceso y ampliación de la línea de crédito flexible (LCF) con el FMI, y una estructura de financiamiento externo concentrada en IED y pasivos de largo plazo, han fortalecido la capacidad del país para hacer frente a choques externos en un contexto de gran incertidumbre como el actual”.

En 2020

En 2020 el déficit de la cuenta corriente en dólares se situó en US$9.083 millones y en 3,3% como proporción del PIB. Lo anterior implicó una reducción de US$5.201 millones en el desbalance externo y de 1,1 punto como porcentaje del producto frente a lo registrado en 2019.

También, la disminución de los egresos netos por renta factorial, de US$10.114 millones en 2019 a US$5.386 millones en 2020, fue el rubro que más contribuyó a la corrección del déficit corriente, seguido por un menor déficit comercial de bienes, de US$8.451 millones a US$7.918 millones, y por un leve aumento en los ingresos netos por transferencias (de US$8.704 millones a US$8.724 millones).

Lo anterior fue parcialmente compensado por un incremento en el déficit de la balanza comercial de servicios de US$4.425 millones a US$4.503 millones. La dinámica de la renta factorial se constituyó en la principal fuente de reducción del déficit de la cuenta corriente en 2020. En ese año la reducción del déficit en la renta neta de los factores fue de US$4.728 millones.

Este ajuste se explicó principalmente durante 2020 por la caída en las utilidades de las firmas con IED debido a los efectos de la pandemia sobre la economía colombiana, lo que se ha reflejado en una fuerte contracción en el nivel de las ventas internas y externas, en una reducción en los precios de exportación y en menores utilidades en dólares por la depreciación del peso colombiano.