Una nueva adhesión recibió ayer la campaña del candidato presidencial Rodolfo Hernández, pues se sumó el exgobernador de Boyacá Carlos Amaya, quien fue precandidato para la primera vuelta como integrante de la coalición Centro Esperanza, y tras ser vencido en la consulta interpartidista del 13 de marzo, apoyó a Sergio Fajardo.

De esta forma se siguen reacomodando en las campañas de Rodolfo Hernández y Gustavo Petro la mayoría de quienes integraron la coalición Centro Esperanza, la cual llegó a su fin después de que Fajardo no alcanzara la segunda vuelta.

Esta semana la representante a la Cámara por el Valle del Partido Alianza Verde, Catalina Ortiz, quien integró la Centro Esperanza, adhirió a Rodolfo Hernández.

Amaya hizo el anuncio desde Vichada vía Facebook Live. "Décadas atrás entre conservadores contra liberales; luego que la guerra o la paz y entre uribismo y santismo. Y hoy quieren que le demos otra vuelta a ese ciclo de fracturas haciéndonos creer que no hay más camino que uribismo o petrismo", afirmó.

Destacó Amaya que Hernández será la persona que unirá al país: "Puede representar el inicio del fin de esa espiral de divisiones que ha marcado la historia del país".

Por su parte, la representante Catalina Ortiz saludó la llegada del exgobernador Carlos Amaya a la campaña de Rodolfo Hernández. “Mi querido Carlos Amaya, bienvenido a la opción de centro en segunda vuelta. De acuerdo en que nos quieren obligar a ver el mundo entre petristas y uribistas. Es una opción realmente diferente”, dijo. 

Cabe recordar que la semana pasada, Amaya fue uno de cuatro reconocidos políticos que hicieron parte de la coalición Centro Esperanza que sostuvieron una reunión con Hernández en la capital de la República, con miras a eventualmente apoyar su aspiración. Los otros fueron Sergio Fajardo, el senador Jorge Robledo y el exministro Juan Fernando Cristo.

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Sin embargo, el pasado sábado, de forma sorpresiva, Hernández anunció que este diálogo quedó cancelado. “Ellos quieren cambiar todo el programa que ganó. Como ganó nuestro programa, nosotros nos tenemos que hacer respetar porque fueron seis millones de colombianos que votaron a favor de este programa que presentamos", dijo el exalcalde de Bucaramanga.

Mientras que el domingo pasado, Fajardo, Robledo, Amaya, Juan Manuel Galán y Cristo en un comunicado explicaron que “ayer (sábado) presentamos el documento y se acordó que hoy domingo el equipo de campaña del candidato daría respuesta (...) Rodolfo Hernández decidió, sin discusión previa, no aceptarlas. En consecuencia, se acaban las conversaciones”.

No obstante, el pasado lunes Hernández dijo que tenía las puertas abiertas a Fajardo para que adhiriera a su candidatura. Sin embargo, el exgobernador señaló que nada tenía que hablar ahora con el candidato.

Por su parte, Robledo ayer anunció que votará en blanco en segunda vuelta, y el partido que representa, Dignidad, dejó en libertad a sus militantes para que voten a conciencia.

Entonces el único de este colectivo de exintegrantes de la coalición Centro Esperanza que se reunieron en días pasados con Hernández y que terminó recalando en su candidatura fue el exgobernador Amaya.

Falta por ver qué sucederá con el exministro Juan Fernando Cristo, quien ayer sostuvo una reunión con los senadores electos por la lista que presentó la coalición Centro Esperanza: Humberto de La Calle, Guido Echeverri y Gustavo Moreno, “para discutir nuestra posición frente a la segunda vuelta presidencial”, explicó Cristo.

De igual forma ayer los militantes de Compromiso Ciudadano, el movimiento que desde finales de los años 90 lidera Sergio Fajardo, quedaron en libertad para votar por el candidato presidencial de su preferencia para esta segunda vuelta, según anunció esta formación en un comunicado.

Petro en las regiones

Mientras tanto, el candidato Gustavo Petro siguió con su recorrido por diferentes regiones ayer en el departamento de Boyacá. 

Petro reveló los puntos del diálogo con camioneros y taxistas en Duitama, el lunes pasado, que extiende para estos profesionales en todo el país, como son un fondo de chatarrización que permita aumentar la capacidad de los vehículos y transitar a energías más limpias disponibles.

Así mismo comités de veedurías de los camioneros sobre los contratos de concesión vial y peajes; además, búsqueda de alternativas ocupacionales a conductores de plataformas.

También legalización del mototaxismo y transporte público donde estén ausentes taxis y buses formalizados; y buscar como base la media pensión a todo camionero y taxista, garantizada por el Estado.