México: oficialismo y oposición en búsqueda de presidencial | El Nuevo Siglo
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Sábado, 8 de Julio de 2023
Redacción internacional con Europa Press

AUNQUE la elección del sucesor de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en la presidencia de México se verificará dentro de once meses, el proceso para definir un candidato único, tanto en el oficialismo como la oposición, arrancó y en la naciente campaña se empiezan a posicionar las mujeres, abriendo la posibilidad de que el 2 de junio del 2024 el duelo de las urnas sea femenino.

En un proceso largo y mediante sucesivas encuestas a la ciudadanía, tanto el gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que reúne a la mayoría izquierdista, como la oposición que bajo el Frente Amplio por México aúpa al Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) elegirán a su carta presidencial.

Morena acordó por unanimidad que su candidato se definirá mediante una encuesta a nivel nacional que incluirá varias preguntas con las que se medirá la percepción de la población sobre los “atributos” de los aspirantes. El ganador se develará el 6 de septiembre.

En la oposición el proceso será más dispendioso ya que los precandidatos deben primero reunir al menos 150.000 firmas de apoyo en 17 de los 32 estados entre el 12 de julio y 3 de agosto. La primera encuesta, también nacional, se realizará del 11 al 16 de agosto y de allí se escogerán tres finalistas, quienes se enfrentarán en cinco debates. Posteriormente habrá un segundo sondeo y una consulta abierta a la ciudadanía con las que definirá el elegido, cuyo nombre se hará público el 3 de septiembre.

En ese marco, mientras los ‘corcholatas’ favoritos del oficialismo emprendieron gira nacional, a saber, el excanciller Marcelo Ebrard y la exjefa de gobierno, Claudia Sheinbaum (primera mujer en llegar a ese alto cargo por voto popular), la oposición mexicana cierra hoy el proceso de inscripción de aspirantes, en una baraja en la que destaca, tanto por su experiencia como por su franqueza, la senadora de origen indígena Xóchitl Gálvez perfilándose como favorita.

Gálvez, ingeniera y empresaria de 60 años, acapara cada vez más la atención mediática en un contexto favorable a la llegada de una mujer por primera vez a la presidencia de México, en reemplazo del izquierdista Andrés Manuel López Obrador.

De ganar la nominación, senadora del (PAN, conservador) podría disputar el poder con Sheinbaum, quien a su vez lidera las preferencias para quedarse con la candidatura oficialista, por lo que analistas no descartan una inédita batalla entre mujeres por la presidencia de México.

"¡Claro que vamos a poder! ¡Aunque el jefe de campaña sea el mismísimo presidente!", lanzó Gálvez tras inscribir su postulación, aludiendo a los duros ataques verbales que viene recibiendo de López Obrador.

"México merece más", agregó, al tiempo que hizo un llamado a "parar el odio (...), la confrontación y resolver los grandes problemas" de México, la segunda economía latinoamericana después de la brasileña.


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Junto con Gálvez se inscribieron ese martes los diputados opositores Santiago Creel, Gabriel Quadri y Beatriz Parede -sumando una docena de aspirantes- dos semanas después de que la izquierda emprendiera una campaña para seleccionar al aspirante de la llamada Cuarta Transformación, el proyecto de López Obrador.

Izquierda incómoda

De padre otomí (pueblo ancestral del centro de México), Gálvez concentra la atención de los medios desde que el pasado 12 de junio intentó sin éxito ingresar a la conferencia de prensa diaria de López Obrador para exigir una réplica ante señalamientos del gobernante.

En medio de ese protagonismo creciente, López Obrador la acusó de ser la "candidata de la mafia del poder", como se refiere a los partidos tradicionales a los que señala de haber saqueado al país.

Un día antes, Gálvez, empresaria del sector tecnológico, tildó al presidente de "machista", luego de que éste afirmara que su candidatura estaba siendo inflada por adversarios políticos y medios de comunicación, y la acusara de simular un interés por los pobres.

"No puede concebir que una mujer valiente, preparada, pueda obtener una posición política por sí misma. Se asusta conmigo porque soy una mujer independiente", respondió el congresista ante la prensa, en lo que comentaristas interpretaron como una alusión velada al supuesto favoritismo del presidente por Sheinbaum.

"Estoy aquí por mérito propio", agregó Gálvez, quien anticipó una "oleada de odio" en su contra. "Van a intentar destrozarme, desprestigiarme, (pero) voy a aguantar, mi vida siempre ha sido a contracorriente", sostuvo recientemente en una entrevista televisiva, aludiendo a sus orígenes humildes.

Analistas considerando que Gálvez, al levantar banderas propias de la izquierda, ha logrado desacomodar a Morena, el partido de López Obrador que avanza como amplio favorito para gobernar por seis años más, independientemente de quién sea su candidato, según varios sondeos.

"Morena estaba muy cómoda y muy seguro pensando que la contienda en 2024 la tenían ya casi que ganada (...). Fue un primer calambre" y "contrario a lo que pensaban va a haber juego en 2024, no la va a tener tan sencilla", comentó a la AFP la analista política Paula Sofía Vázquez.

 

Las encuestas

Todo el proceso de elección interno se mueve con base en las encuestas y de allí que estas mediciones se realicen constantemente, develando un sube y baja entre los favoritos, especialmente en Morena.

Hace una semana, la medición del diario El Financiero, reveló que en la oposición los favoritos son Creel, Gálvez, Enrique de la Madrid y Beatriz Paredes.

El apoyo a Gálvez (PAN), una de las figuras más conocidas en el poder legislativo debido a sus ‘encontronazos’ con legisladores oficialistas y el propio presidente López Obrador, creció tras el duro e injustificado ataque del presidente López Obrador. Entre ellos, el senador Juan Carlos Romero Hicks, quien optó por abandonar la contienda para apoyar la “gran expectativa de cambio” que ella encarna.

La también senadora Paredes, uno de los grandes referentes del PRI empieza a ganar terreno, al punto que según la mencionada encuesta se ubica en segundo lugar de las preferencias electorales con un 8 por ciento, tan solo cinco por debajo de la parlamentaria Gálvez.

Y, en cuanto a imagen, esta última tiene mejor opinión positiva (35%) frente al 25% que logra su inmediata competidora.

Santiago Creel, líder de la Cámara de Diputados y el priista Enrique de la Madrid, ocupan los siguientes lugares en la intención de voto.

En la otra orilla del espectro político empieza a reinar la confusión por la variación en las tendencias que reveló la más reciente encuesta, la de Rubrum divulgada el primer día de este mes, ya que si las anteriores mediciones de otras firmas coincidían en señalar el amplio favoritismo de Sheinbaum, en ésta el primer lugar y rozando los diez puntos de ventaja lo obtiene Ebrard, con 35.5%.

En el tercer lugar se encasilla Gerardo Fernández, del Partido de los Trabajadores (PT) con 13.8%, seguido por Adan Augusto López (13.4%), Manuel Velasco (5.2%) y Ricardo Monreal (5.0%).

La divulgada por El Financiero, hace una semana, ubicaba en primer lugar a la exalcaldesa de Ciudad de México con 28% y al excanciller con 20%.

Por su parte en el sondeo de opinión política realizado en la tercera semana de junio, los guarismos eran de 41%, 26% y 11% para Sheinbaum, Ebrard y López, respectivamente.

Aunque la campaña para la definición de las dos coaliciones políticas hasta ahora empieza, se puede visualizar un cerrado duelo entre los dos favoritos del oficialismo, ambos del afecto del presidente AMLO, que de seguro estarán en el sube y baja del primer lugar en los sondeos de intención de voto. De allí que todos sus actos proselitistas, declaraciones y propuestas serán claves para ganar o perder apoyos.

Morena apuesta a lograr otro sexenio en el poder y seguir haciendo historia en México. En la otra esquina, la oposición con el eslogan “Vamos en unidad, ciudadanía y partidos’ apuesta al cambio radical en casi todas las políticas adoptadas por el gobernante.

Así, pues, está la largada hacia el 2024 con varios corcholatas que deberán demostrar al pueblo que tienen las capacidades e idoneidad para gobernarlo porque, como reseñamos, es éste quien define los candidatos en sendas encuestas nacionales. /Redacción internacional con Europa Press