Si María Antonieta y toda la corte del rey Luis XV estuvieran en el Trópico, ¿qué habría usado? Esa es la pregunta que siempre se hace Jaime Enrique Rodríguez Cardona, director creativo de la marca Le Vau, cada vez que empieza a diseñar sus colecciones y “Selfridges” no podía ser la excepción.
Rodríguez Cardona, es un dedicado lector, al que le apasiona el arte y el lujo, tanto como la historia de las monarquías europeas, especialmente, todo lo que ocurre alrededor del Palacio de Versalles y sus icónicos anfitriones, los reyes Luis XV y María Antonieta.
En ellos y en su imaginario viaje al continente americano está basada su marca Le Vau, y pensando en eso creó “Selfriedges”, una colección cápsula de camisas, compuesta por seis prendas en las que abanicos o más conocidos en francés como “éventail”, son el hilo conductor de la más reciente propuesta del novel diseñador bogotano.
- Le puede interesar: Libros recomendados para leer durante el mes del amor y la amistad
“Los abanicos hacían parte de los accesorios predilectos de las flappers en los años 20’ y varios siglos antes, para María Antonieta en Versalles, eran parte esencial de sus atuendos a la hora de recorrer los jardines de su palacio. Así se convierten en el hilo de oro que teje esta nueva historia llamada “Selfridges”. Además, quise unir tres ideas en esta muestra realizada por la comunidad Emberá Chamí. Los locos años 20 con el negro y blanco de Chanel, lo latinoamericano con la técnica utilizada y su simbología, que con ese toque dorado nos recuerda el barroco francés”, explicó Jaime Enrique Rodríguez.
Para el joven diseñador, así como para Luis XV, la flor de liz y el sol fueron los símbolos de su monarquía absoluta, para nuestra comunidad indígena Emberá Chamí los símbolos tienen su propio significado y nombre.
De esta manera, Le Vau, quiere integrar como sello distintivo de la marca, la artesanía colombiana, después de cuestionarse durante mucho tiempo la forma en la que podrían unir lo colombiano con el barroco francés.
“Para nadie es un secreto que en el siglo XVIII lo artesanal convirtió al palacio de Versalles en una joya de la corona francesa. Con la llegada imaginaria de la reina María Antonieta a tierras colombianas, Le Vau quiso darle la bienvenida a un nuevo integrante en este universo, la sabiduría y el saber hacer de la comunidad Emberá Chamí”, agregó el director creativo de la marca.
Jaime Enrique Rodríguez Cardona, logra un punto de encuentro entre las habilidosas manos tejedoras de los Emberá Chamí y las de los bordadores de la corte francesa. En esta oportunidad los hilos de oro, plata y piedras semipreciosas son reemplazados por chaquiras e hilos de nilón para dar vida a un mundo aristocráticamente latinoamericano.
“Selfridges” tiene además una historia detrás de cada prenda, ya que con la venta de cada una de las piezas de esta colección, se realizara una donación del 10% de su valor a la comunidad Emberá Chamí.