Todos tranquilos 

Pocos en el Senado consideraban que la curul del senador Plinio Olano estaba en riesgo. Por lo mismo no hubo mayor sorpresa frente al fallo del Consejo de Estado que negó la demanda de pérdida de investidura interpuesta contra el parlamentario por haber incurrido, presuntamente, en tráfico de influencias y conflicto de intereses. La demanda fue interpuesta por la Asociación Red Nacional de Veedurías Ciudadanas, según la cual el congresista utilizó sus influencias con políticos de Sutamarchán (Boyacá) para lograr que los habitantes de ese municipio votaran por él para las elecciones de 2010, a cambio de unidades sanitarias.

Pendiente del debate

Durante el debate sobre la unión marital de personas del mismo sexo, la procuradora delegada para temas de Infancia, Ilva Miryam Hoyos, estuvo presente, defendiendo la postura del Ministerio Público. La alta funcionaria se mostró sorprendida cuando uno de los congresistas le pidió que no se sentara en las curules de los senadores. Sin embargo, ella explicó que uno de los legisladores la invitó a sentarse allí. La cuestión no pasó a mayores.

No lo demandó

El pastor Milton Rodríguez se acercó a esta Sección y manifestó que no era cierto que hubiera interpuesto una demanda contra el presidente del Senado, Roy Barreras por un supuesto pacto en el que éste se comprometía a no apoyar el aborto y la unión marital gay. “Yo no demandé al senador Barreras, quien lo demandó fue un pastor de Bogotá llamado Luis Correa, a quien yo no conozco y no estoy de acuerdo con dicha acción judicial”. También negó que su confesión religiosa le haya prometido votos al senador vallecaucano.