Las empresas petroleras colombiana Ecopetrol, la estatal china Sinochem y el Banco de Desarrollo de China firmaron un acuerdo de principio para construir un oleoducto que conectará la región de donde proviene la mayoría del crudo que extrae Colombia con los puertos del Océano Pacífico.

 

 

"El oleoducto que va desde Venezuela hasta el Pacífico es una inversión que interesa muchísimo al gobierno chino. Así me lo expresaron el presidente y varios de los empresarios", dijo el mandatario colombiano Juan Manuel Santos, que realiza una visita de Estado a China.

Santos se reunió con su homólogo chino Hu Jintao, en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín.

 

 

Según el presidente colombiano, Pekín también manifestó interés en la construcción de una red ferroviaria que permitirá conectar el Océano Pacífico con el oriente del país e incluso con Venezuela.

 

 

"Hay un inmenso interés por parte no sólo del gobierno, sino de las empresas con que estuvimos reunidos, en inversiones específicas como el oleoducto", dijo Santos tras reunirse con Hu.

 

 

Durante la reunión entre los dos mandatarios se firmaron nueve acuerdos de principio para impulsar la cooperación en sectores como el energético, infraestructuras, alimentación y cultura.

 

 

Colombia ocupa el puesto decimoctavo entre los proveedores mundiales de crudo a China, por detrás de naciones como Brasil, con 8 millones de toneladas y Venezuela con 7,5 millones.

 

 

Petrochina y Sinopec, las dos mayores petroleras chinas, lideran las importaciones de crudo desde Colombia, aunque Sinochem ha venido ampliando su presencia en el país después de que el grupo francés Total le cediera en febrero su filial Tepma BV, que controla activos en el sector petrolero colombiano.

 

 

El viaje del presidente colombiano a Pekín y Shanghai busca abrir nuevos mercados a los productos colombianos e incentivar la inversión extranjera en Colombia, convencido de que esas estrategias contribuirán al desarrollo del país y por ende a reducir el desempleo, que en marzo pasado llegó a 10,4%.

 

 

"Colombia tiene lo que China necesita y China tiene lo que Colombia necesita. Si identificamos proyectos concretos y pasos concretos, esta visita se puede traducir en grandes beneficios para Colombia y para China", señaló Santos.

 

 

Ambos países evalúan la firma de un tratado de libre comercio. Para tal efecto, los respectivos ministros de Comercio discutieron la formación de un grupo de estudio que analizará la viabilidad de un eventual acuerdo.

 

 

Este grupo, que estará compuesto por especialistas tanto del sector público como del privado, entregará sus conclusiones en junio del próximo año. Según funcionarios del gobierno colombiano, los productos que más interesan a China serían la carne bovina, frutas y café.

 

 

En los dos primeros meses de 2012 las ventas colombianas a China sumaron 798 millones de dólares, pero la balanza comercial es deficitaria para Colombia en 547,8 millones de dólares, según las cifras oficiales. El 70% de las exportaciones de Colombia a China son petróleo y carbón.

Hasta la fecha tres países latinoamericanos -Chile, Perú y Costa Rica- han firmado tratados de libre comercio con Pekín.

 

 

Aunque en la agenda de la visita de Santos figuraban fundamentalmente asuntos de la agenda bilateral, el presidente colombiano y su homólogo chino también dialogaron sobre temas como la situación en Siria y el interés en lograr un "consenso" en la cumbre de la ONU sobre el desarrollo sostenible Río+20.

 

 

"Como países emergentes, si nosotros coordinamos nuestras posiciones vamos a ser mucho más relevantes. Si China y América Latina pueden presentarse ante esos foros con posiciones comunes, el peso específico de cada uno se va a multiplicar", señaló Santos, quien añadió que Hu le manifestó su interés en estrechar la relación con la Alianza del Pacífico, recién creada por los gobiernos de Colombia, Chile, México y Perú.

 

 

La visita asiática de Santos, que se inició en Singapur, proseguirá este jueves con reuniones con el primer ministro chino Wen Jiabao y el viceprimer ministro Li Keqiang, y culminará el viernes en Shanghai.