Carlos Alberto Estefan Upegui‪‪‪‪‬‬‬‬ | El Nuevo Siglo
Martes, 5 de Mayo de 2015

BRINDAR SEGURIDAD

El agro en el posconflicto

Hablar  de posconflicto es dar por sentado que las conversaciones en La Habana van a concluir con la firma de un Acuerdo, entre quienes allí sentados supuestamente representan a la subversión, como a todos los ciudadanos de este país.  Los unos en su condición de  interlocutores de las Farc y los otros, como voceros del Gobierno de Juan Manuel Santos, elegido por las mayorías del pueblo colombiano sobre la base de lograr una paz negociada. Sin embargo, cerca de 7 millones de  compatriotas, número casi igual a los que lo elegimos, si bien se supone también están de acuerdo con un país en paz, su voto negativo a Santos podría  interpretarse como el deseo de utilizar una manera distinta para lograrla.

Aceptemos  también que hay allí, quienes prefieren la fórmula contradictoria de utilizar la guerra como una alternativa para “pacificar” el país. Entre tanto, los asaltos e incursiones armadas de los últimos días, nos llevan a concluir que  la voluntad de todos los que se encuentran al margen de la ley no es la misma de quienes concurren a la Mesa de Negociación. E igualmente, la vigencia aún activa de otras organizaciones guerrilleras como el Eln, indica que quienes se dicen estar hablando a nombre de los violentos no representan la voluntad de todos.

Así las cosas, en cuanto a los ciudadanos de bien se habla de consultar el Constituyente primario para conocer su opinión por la vía de las mayorías; mientras no se sabe cuál podría ser  el método para resolver igual duda respecto de los alzados en armas. En ese orden de ideas, podría firmarse un Acuerdo que aun refrendado por las mayorías en las urnas, no necesariamente garantizaría igual actitud de la contraparte, poniéndose en duda la consecución de una paz total y duradera.

En consecuencia, para hablar de posconflicto tendría que resolverse primero ese dilema y  brindar la seguridad para invertir sin la pesadilla de la extorsión y el secuestro; ni mucho menos poniendo los muertos que a estas alturas ya han sido muchos. El “agro en el posconflicto” es el nombre de un evento que se llevará a cabo próximamente en la Biblioteca Germán Arciniegas de Villavicencio, convocada por Asiall. Esperamos no se trate de un propósito solamente comercial, pues con este mismo fin  se anuncian  “cupos para stand y publicidad” de las empresas asistentes. Lo cierto es que es labor del Gobierno, suponemos los dirigentes gremiales y la prensa, llamar primero a concertar al sector privado y a quienes hacen parte de sus cuadros directivos de los organismos gremiales a nivel nacional, para estructurar un plan estratégico conjunto del cual formen parte todos los actores. Como igual  tendrá que hacerse a escala territorial con gobernaciones y alcaldías, y los voceros más representativos de la vida regional y local.