Cundinamarca, cuyo nombre probablemente significa tierra del cóndor, ha estado siempre en el centro de la historia de lo que es hoy Colombia.
Se piensa que en estas ricas tierras andinas hubo habitantes aproximadamente desde el año 10.500 a.C. Sin embargo, exceptuando algunos petroglifos y herramientas de piedra encontrados en la región, hay pocas huellas de los pueblos anteriores a los muiscas.
Ya, para el año 1.200 a.C. los Muiscas, (familia lingüística Chibcha) habían creado enclaves en esta región andina que, con el tiempo, gozaron de estrictas tradiciones, estructuras familiares, gobiernos y jerarquías bien establecidas.
Aunque no tenían escritura, se sabe que eran agricultores y comerciantes, explotaban y comerciaba la sal, elaboraban mantas, trabajaban bellamente el oro y cultivaban maíz, tomate, papa y quinua, además de frutas andinas, tales como curubas y uchuvas.
Pero la llegada de los españoles, con sus caballos, armas, estandartes de conquista y la cruz como emblema supremo de la religión y la cultura que traían del viejo mundo, cambiarían para siempre la vida en el “nuevo” continente.
El 6 de agosto de 1538, Jiménez de Quesada, ante un puñado de ranchos, al pie de los imponentes cerros que hoy conocemos como Monserrate y Guadalupe, fundó la aldea de Santa Fe de Bogotá. En 1539 arribaron Nicolás de Federman y Sebastián de Belalcázar.
Cundinamarca y Bogotá se fueron convirtiendo en el centro político cultural y económico, primero del virreinato de la Nueva Granada y, luego, durante los años de lucha libertadora, en centro de las ideas y acciones independentistas.
En 1810 Cundinamarca fue la primera provincia que declaró su independencia, conservando su lealtad al rey. Para su gobierno se nombró una junta suprema.
Un año más tarde, en 1811, ésta junta decidió darle una constitución a la provincia y declaró el departamento como Estado. Jorge Tadeo Lozano fue electo como primer presidente. Lamentablemente, los patriotas se encontraban divididos entre centralistas, encabezados por Antonio Nariño y federalistas, liderados por Camilo Torres.
El 16 de julio de 1813 Cundinamarca, impulsada por Antonio Nariño, firmó una nueva Constitución por la cual declaró la independencia total de España, sin sumisión alguna al rey, convirtiéndose en el primer departamento del país en hacerlo.
Este 16 de julio, en la Gobernación de Cundinamarca, se celebraron los 206 años de la firma de dicha declaración de independencia, en el marco de la celebración del Bicentenario de la campaña libertadora.
Ante el gobernador Jorge Emilio Rey, el presidente del Colegio Máximo de Academias David Rubio, académicos, padres y maestros, más de doscientos cincuenta jóvenes líderes, de los colegios de Cundinamarca, prestaron juramento a las banderas de Colombia y Cundinamarca y recibieron copias de un libro con las 14 constituciones que sentaron las bases para la República de Colombia.
Habría que recordar que, durante el Congreso Constituyente de Cúcuta en 1821, el territorio de la Nueva Granada quedó conformado por los departamentos de Boyacá, Cundinamarca, Cauca y Magdalena y que, en 1886, de acuerdo con la nueva constitución suscrita ese año, se convirtió en Departamento de la nueva República de Colombia.}
Es difícil resumir la importante participación histórica de Cundinamarca en la formación de la nación, no en vano el valor de sus gentes le valió el título de “bastión de la independencia”.