DIEGO ARANGO* | El Nuevo Siglo
Jueves, 6 de Febrero de 2014

El voto en blanco

 

En política los fenómenos se producen y en Colombia podríamos estar frente a uno: el fantasma del voto en blanco. Pues sucede que según las últimas encuestas, el voto en blanco supera la intención presencial por el presidente Santos que registra la segunda votación. ¿Qué se podría hacer en la eventualidad de que eso se diera? ¿Quién pasaría a la segunda vuelta? Pues las autoridades electorales conforme a la Ley tendrían que decidir. Lo más probable es que se repetiría el proceso electoral, ya que el voto en blanco representa una inconformidad pero no encarna persona alguna y son las personas quienes gobiernan y no los fantasmas. De tal suerte que se podría crear un vacío de poder legítimo pues la voz del pueblo prima sobre todas las consideraciones. 

El voto en blanco es una respuesta de la conciencia ciudadana, no necesita de campañas, ni de manzanilla, ni discursos, como tampoco de promotores.  El voto en blanco es una reacción sentida de la población causada por un profundo malestar con los políticos y en este caso también con el Gobierno.  No estamos exentos de este fenómeno, es muy posible que se produzca. Nunca antes en la historia política del país se había registrado una intención tan alta de esta acción positiva. No se puede confundir el voto en blanco que es una acción, frente a la abstención que es un desgano pasivo por la actividad electoral. Por supuesto que la abstención también es una protesta,  pero el voto en blanco o es una protesta activa. 

El presidente Santos en su enorme esfuerzo por presentar buenos resultados de su gestión, de los cuales no se le pueden desconocer algunos de ellos,  no alcanza a convencer al electorado que otros cuatro años más de mandato serían convenientes para Colombia. Pero los otros candidatos opositores tampoco arrancan simpatías y menos apoyos. La candidata del conservatismo se ubicó en el segundo lugar o mejor dicho en el tercero después del voto en blanco y podría ser quien pase a la segunda ronda con el Presidente. Y pensándolo bien, qué bueno sería que en Colombia gobernara una mujer por primera vez. Si las mujeres fueran solidarias y depositaran su confianza en esta candidata lograrían derrotar al fantasma del voto en blanco y colocar en la Casa de Nariño a la primera mujer Presidenta en la historia del país.

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*Presidente Canal Teleamiga Internacional