El “inspector” de defensa | El Nuevo Siglo
Jueves, 28 de Julio de 2022

Tal vez el presidente Iván Duque pasará a la historia como el último presidente decente que tuvimos. El último que recibió sinceros honores militares y el último moralizador de las fuerzas militares.

Desde que lo conocí en la Sergio Arboleda, más allá de sus aspiraciones de gobernar Colombia realmente siempre fue un tipo decente y eso implica por supuesto no tener quiebres éticos, no maltratar a nadie y no actuar guiado por el resentimiento, la superioridad o la venganza.

El gobierno entrante, desde antes de haberse posesionado, actúa guiado por esos sentimientos.

Si hay un ministerio que necesita un líder es el de Defensa. Para las fuerzas militares, Ejército Nacional, la Armada de la República y la Fuerza Aérea, la moral y el honor son vitales y, en consecuencia, necesitan de un líder que no sólo eleve la moral, sino que genere el más alto respeto.

El respeto es como la confianza. Se pierde una vez en la vida y no más. Entre las fuerzas militares y el gobierno entrante se perdió el respeto hace rato…

El nuevo ministro de Defensa fungirá más como un inspector de defensa y no cabe duda de que esa es la intencionalidad. Llega odiando las fuerzas militares y creería que con instrucciones precisas de acabarlas.

Se asume que no hará nada para combatir la criminalidad típica de Colombia pues los criminales, para él, tal vez son las mismas fuerzas militares. No los verdaderos criminales. Esas son víctimas…

Su misión no es otra que terminar de desmoralizar las fuerzas militares más de lo que ya están de saber que tienen que rendirle honores militares a quien les hizo derramar sangre en el pasado.

Es lógico… ¿Qué honor y orgullo podrá sentir cualquier miembro de las fuerzas militares en este momento bajo la égida y faro del próximo comandante supremo y su inspector de defensa? El mismo que siente cualquier maltratado por su “líder” …Todo lo contrario, pues ambos son enemigos de las fuerzas militares bajo el eufemismo de la búsqueda de la paz total.

Dicen que será el ministerio de la paz… Tal vez sea una estrategia para no combatir el narcotráfico, bandas criminales, guerrillas, paramilitares y simplemente logre ser imperio del liderazgo liberal o laissez-faire, es decir, dejarán de combatir la criminalidad y dejarán que todo suceda y así pues finalmente habrá paz total…

El nuevo ministro de Defensa puede resultar siendo un arma de doble filo. Las fuerzas militares son movidas por la mística, el honor, gloria y moral.

¿Y qué tal si las fuerzas militares se aburren de tanto maltrato (como cualquiera) y se convierten en enemigas del gobierno? Pues han sacrificado sus vidas, sus familias y tiempo para garantizarnos la vida y resulta que a esos por los cuales se sacrificaron … no les importan…

El ministro, por instrucciones del comandante supremo de las fuerzas militares, las minimizará y juzgará para que ellos sí paguen por los “crímenes” cometidos. No las guerrillas ni criminales… Esa es la misión…

juanfelipereyes@hotmail.com