El jaque mate de Gilinski | El Nuevo Siglo
Viernes, 16 de Diciembre de 2022

En el ajedrez el jaque mate solo se alcanza cuando se tiene rodeado de tal manera al rey enemigo que, al amenazarlo de forma directa, éste queda sin ninguna alternativa de movimiento; completamente cercado por el sigiloso y estratégico engranaje que ha venido tejiendo el contendiente que se va a ungir como ganador de la partida.

El pasado 20 de septiembre se dio a conocer el lanzamiento de una nueva OPA frente a Nutresa, esta vez, por parte del grupo árabe IHC. Si bien, esta OPA se declaró desierta por no cumplirse las cantidades mínimas de acciones ofrecidas por el grupo árabe, lo cierto es que la batalla entre el GEA y Gilinski al interior del Grupo Sura estuvo de infarto. Comoquiera que, según lo determinó la Supersociedades, dos de los cuatro miembros de Junta del GEA estaban impedidos para decidir sobre la OPA por primera vez, Gilinski tenía mayorías en la Junta; sin embargo, luego vendría la jugada del GEA: estratégicamente sus cuatro miembros decidieron renunciar y, con ello, Gilinski perdería la posibilidad de incidir sobre la decisión del Grupo Sura, pues con estas renuncias ya no concurría el quorum necesario para deliberar y decidir sobre esta operación.

Si bien podría decirse que en el corto plazo el empresario caleño perdió la batalla, lo cierto es que, como se dice en lenguaje militar, todavía no ha perdido la guerra. Dada la coyuntura actual, una apuesta fuerte por el Grupo Sura podría darle resultados más efectivos que las anteriores OPAS fracasadas.

Gilinski, actualmente, cuenta con alrededor de un 38% de las acciones del Grupo Sura. Para obtener una mayoría en la Asamblea que le otorgue la condición de controlante, realmente, le falta adquirir un poco más del 10% de las acciones. En efecto, el Grupo Sura es la empresa en la que Gilinski está más cerca de obtener las mayorías. Por eso, podría dar resultados una OPA audaz de Gilinski o de sus aliados dirigida a obtener el pequeño porcentaje de acciones que le faltan para obtener las mayorías.

Las polémicas controversias societarias a las que ha sido sometido el Grupo Sura este año, así como la caída libre del valor de la acción de esta empresa desde la última OPA adelantada frente a ella, son factores que podrían estimular a los accionistas independientes a vender su participación. El éxito de una eventual OPA, por supuesto, dependerá del valor ofrecido en la misma y, otras variables relevantes, dentro de las que se da por descontada la aguerrida y tenaz resistencia del GEA que hasta el momento se ha defendido con mucha inteligencia para evitar la compra hostil.

Realmente, nada está escrito y, ciertamente, es muy difícil predecir cuál será el siguiente paso en esta batalla de largo aliento, pero un análisis jurídico, financiero y societario de lo ocurrido hasta el momento lleva a concluir que si Gilinski logra las mayorías en el Grupo Sura podría estar cerca del punto de quiebre para alcanzar el desenroque del GEA. Con Grupo Sura en sus manos, para el empresario caleño y sus aliados, sería muy fácil contar con el porcentaje de acciones que necesita para aprobar una consecuente OPA por Nutresa y, así, ya teniendo las mayorías de las acciones en Grupo Sura y Nutresa, sería cuestión de trámite la adquisición del Grupo Argos, con lo que los espectadores de esta agónica y apasionante pugna societaria, uno de los hechos más importantes de la historia empresarial del país en los últimos años, por fin presenciaríamos el jaque mate de Gilinski.