Desde el desayuno se sabe qué es la comida. El primer mes del gobierno Petro parece un siglo…
Todos los ministros parecen trabajar en contravía de los intereses de la cartera en la que los nombraron. Y es que ese es el peligro de poner activistas, fanáticos o resentidos de ministros y directores de entidades. Solo hace falta que en Aerocivil nombren a alguien que quiera que decrezca el trasporte aéreo para que no contaminen más con aviones el espacio aéreo colombiano.
Basta ver lo que ha hecho la ministra de Minas y Energía, quien odia las minas y la energía. Por ella que decrezcamos a la par con los demás países del mundo y volvamos a la época de las cavernas. Se preocupa más por el medio ambiente que la misma ministra del Medioambiente. Y es que eso es lo que percibo. Cada funcionario parece estar en el lugar equivocado, defendiendo unos intereses con los que no están alineados ideológicamente…
El Canciller es un comisionado de paz. El de Defensa parece un “oenegero” en busca de algún premio de derechos humanos en Suecia, inspeccionando y desconfiando de las fuerzas militares. El de Transporte se sienta a escuchar ligeramente las quejas que el alcalde de Manizales le da a Petro sobre el aeropuerto para las “elites”. El del café… El de Hacienda es anacrónico y ese sí que está alejado de la realidad colombiana y parece rueda suelta. El del Interior es un agitador de masas que azuza al pueblo para que exija a punta de movilizaciones populares la aprobación de la reforma tributaria. El encargado de restituir las tierras y cuidarlas parece que lidera la posesión de hecho de varias fincas en Colombia. El director de inteligencia del Estado es ex M-19 y filósofo. Se “desarticularon” a las fuerzas militares echando decenas de generales sobre los que se decía que tenían la experiencia necesaria para combatir el terrorismo y el narcotráfico, pero al mismo tiempo el mismo presidente quiere crear divisiones de clases sociales en las fuerzas militares…Por eso no le importó dejar vestidos a los militares para la ceremonia más importante que tiene un presidente después de la posesión. Finalmente terminó yendo, pero cuando a él le dio la gana ir. El ministro de Justicia hace propuestas ridículas y no consistentes con el nivel de criminalidad e impunidad que tiene Colombia.
La Primera Dama es la bailarina número uno de Colombia. Y ni hablar de la Vicepresidente y su imaginario ministerio de la Igualdad.
En fin, yo si no soy de los que piensan ingenuamente que hay que darles tiempo y que las instituciones en Colombia “son fuertes” ... Tan fuertes que creo que todas las instituciones están alineadas en este momento con la ideología del gobierno. Muy fuertes y objetivas…
Chile nos mandó un mensaje contundente. No basta el discurso. No basta el romanticismo político. No bastan los simbolismos. Tarde o temprano se quedan cortos y empieza a notarse ...
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