Regreso de viaje de trabajo y en El Dorado me tropiezo con una valla luminosa del Grupo Éxito, al que pertenece Carulla, promocionando el más reciente trabajo musical de Juanes: Mis planes son amarte.
Yo, que por cuenta de Carulla he perdido no solo la otredad, sino también la mismidad, en un acto de esperanza tarareo “Mis cartas yo ya he tirado/ Los miedos ya están a un lado”.
Cómo quisiera poder cantarle al Grupo Éxito Mis planes son amarte; pero es imposible amar a quien me maltrata como lo han hecho ellos conmigo, solo porque tengo la desgracia de estar muro de por medio con su tienda de Rosales.
Mis planes son amarte querido Grupo Éxito, cuando entiendas que una empresa es grande no por la suma de sus partes, sino porque crece conservando la calidez de cuando era chica. O quizás honrando la identidad que pregonan: “La historia está escrita con tenacidad y humildad, con razón y con corazón, con pasión y con deseo de servir”.
Mis planes son amarte querido Grupo Éxito, cuando más que cliente de Carulla de Rosales, que lo he sido desde el mismo día que Samuel Azout abrió la sucursal en mi barrio, me consideren una vecina, una ciudadana, un ser humano.
Mis planes son amarte pero “no sé por dónde empezar/ (…)/ empiezo a sentir el frío”, impotente al ver cómo Carulla que dizque “satisface con un estilo único de amabilidad y servicio las necesidades de los clientes todos los días”, ignora la mía de dormir y privilegia la suya de contar con planta generadora de energía, ventiladores, extractores, refrigeradores, enfriadores, neveras y congeladores.
Mis planes son amarte, si me devuelves mi derecho a descansar para poder continuar trabajando feliz como Consultora Senior en la construcción de la Colombia del posconflicto.
Mis planes son amarte, cuando recuperes la escucha empática, esa que hizo grande a don Gustavo Toro, o la bonhomía de don José Carulla Vidal, o la calidez de don Alberto Azout y dejes de comportarte como la suma de negocios que te volvió distante: ingresos operacionales por $13,5 billones, con un crecimiento del 34,9% en el primer trimestre de este 2017.
Mis planes son amarte “y los tuyos son a la luna”, tan lejos que estás de tus clientes más cercanos; pero aunque solo soy una mamá que trabaja tengo fe en que “todo va a salir mejor”, para que en mí se cumpla tu promesa de valor: “Servirte”.