GABRIEL ORTIZ | El Nuevo Siglo
Viernes, 3 de Enero de 2014

Agridulce 2014

 

2014 agridulce para los pensionados que el año anterior habían recibido alentador mensaje cuando se definió el incremento del salario mínimo tras acuerdo entre las partes. Las centrales de trabajadores revelaron que entre los acuerdos con el gobierno se encontraban dos temas vitales para los viejos que todo lo dieron para obtener una remuneración para el poco tiempo que les resta de vida.

Se dijo entonces que los pensionados estaban cobijados por una reducción del 12 al 4 por ciento en los aportes de salud y que el incremento de las mesadas sería igual al del salario mínimo, es decir en un 4.5%. Estos dos anuncios llenaron de satisfacción a hombres y mujeres que dependen de los precarios dineros de una pensión que año tras año se deteriora.

Pero, ¡oh sorpresa la que ahora se llevan cuando empiezan a buscar la manera de saquearles sus derechos!. La ley dice que las prestaciones, entre las que se cuentan las pensiones son intocables porque se trata de derechos adquiridos, pero en este país, las leyes están para ser violadas y por ello, buscan eludir lo convenido. Quieren que la reducción de los aportes para salud sólo sea para las pensiones menores. El  reajuste anual es precisamente para que no se diezmen las pensiones y los derechos de quienes han dedicado la mejor parte de su vida a un arduo trabajo. Ya las pensiones sufrieron un raponazo cuando le echaron mano a un porcentaje de la prima semestral de medio año.

Apenas es razonable la pretensión de los viejos a los que nadie defiende. Es imposible entender que los millonarios salarios de los parlamentarios se incrementen escandalosamente, cuando se les aplica una reducción a las primas que reciben quienes tradicionalmente sólo trabajan dos días a la semana.

Lamentablemente en este país “en el 506 y en el 2000 también”, como dice Cambalache, la cuerda sigue rompiéndose por lo más delgado. En este  2014, también.

Los dineros que aportaron los pensionados para su retiro se esfumaron en gran parte y nadie responde por ellos.

¿Será posible que antes de la alcaldada que se viene encima alguien se compadezca de los pensionados que hasta ahora sólo han servido para votar por quienes lo ostentan todo? Qué amargo despertar en este 2014 para los viejos servidores.

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BLANCO: José Péckerman, el mejor técnico de América.

NEGRO: El accidente de Schumacher.

gabrielortiz10@hotmail.com