GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 6 de Noviembre de 2011

Diferencias

Interesante  “No bote su voto este domingo” (octubre 28) de Rudolf Hommes, relativo al proceso electoral que culminó el 30 del mes pasado. Se pensó que cubriría el concepto del “voto útil”, según el cual el acto personal ha de coincidir con el del triunfador. Si fuera así, se aclara que, hace mucho tiempo, quien escribe no ha producido tal resultado. Se sugiere, a quien quiera seguir la línea indicada, alejarse de este servidor: tal es la conclusión derivada de la evidencia empírica desde los intentos infructuosos de Horacio Serpa de convertirse en presidente de la República.
Según Hommes, las decisiones de los votantes no suelen ser racionales y se basa en la opinión de Camilo Herrera. Es probable que ambos tengan razón.
Como corolario es entendible el desacuerdo con la siguiente tesis: “Lo que no se debe hacer es votar por los que ya no tienen posibilidad de ganar” y esta afirmación concuerda con la actitud adoptada respecto al precepto del voto útil. En efecto, en “Talante 25” (octubre 30), se expresó preferencia por David Luna, o sea, un aspirante a la alcaldía de Bogotá, sin probabilidad alguna de éxito según las encuestas. Se indicó la razón en el escrito citado: “La democracia y la vigencia de los partidos se asocian y Luna está vinculado al liberalismo”. Gina Parody seguía un criterio antipartido y Enrique Peñalosa es cambiante en tal sentido; alguna vez fue liberal y ahora es verde con el respaldo de la U. Al adherir siempre al previsible triunfador se corre el riesgo de abandonar las convicciones propias. Supuso Hommes que votarían por Parody los adversarios de la corrupción pero el oponente más efectivo fue Petro a través de su informe sobre el carrusel de la contratación.
Hay divergencia respecto a otro postulado de Hommes: “Entonces los que no desean que repita el Polo, deben votar por Gina o por Peñalosa”, o sea, no se reconoce que Petro se retiró del Polo. La comunidad no acogió, a plenitud, esta propaganda negra.
La realidad es que Petro será alcalde a partir de enero. Será un gobierno de minorías porque lo apoyó sólo un tercio del voto bogotano. Conviene que logre entendimiento al menos con los principales líderes vencidos y sus respectivas agrupaciones políticas, lo cual debería ser un acuerdo sobre lo fundamental en los términos de Álvaro Gómez Hurtado.