JUAN DANIEL JARAMILLO ORTIZ | El Nuevo Siglo
Lunes, 3 de Marzo de 2014

Por Raisbeck o Uribe

 

En  una campaña que termina sin ideas hay dos candidatos del Partido Conservador a la Cámara de Representantes por Bogotá y Cundinamarca que se han ido por la vía de propuestas inteligentes. Por cualquiera de ellos vale la pena votar.

Daniel Raisbeck es un ave rara en medio de nuestro entorno tropical donde se heredan y reclaman con descaro curules y se ha creado una dura costra de zánganos y parásitos que medran incrustados en el Estado o en instituciones internacionales por cuenta de Colombia. Seres cuya función única es succionar presupuestos públicos sin tener la menor idea de lo que es trabajo productivo.

Daniel obtuvo su pregrado en George Washington University (Washington DC) en una carrera apasionante que es Clásicos. Siguió su formación en Historia en Tulane (Nueva Orleans) y se prepara a recibir su PhD de Freie Universitat (Berlin). A sus 32 años dirige el Archivo Histórico de la Universidad del Rosario. Se ha lanzado invocando el credo político libertario que tiene muchas áreas de coincidencia con el conservatismo.

No más políticos profesionales, viene exigiendo este candidato con frescura conceptual en verdad cautivante. Por esta razón hay que elegirlo para que tramite y saque adelante la iniciativa de imponer límites a los períodos en que un congresista puede salir elegido para que no se sigan presentando monstruosidades como la undécima elección del dizque conservador Roberto Gerlein, un cavernario yermo en reflexión, verdadero pordiosero intelectual, manzanillo torticero, detestable y vulgar, más afectado en su dicción que un travestista profesional de antro, cuya denominación de conservador nos avergüenza y compunge a quienes lo somos con orgullo.

Burkeano pero también igualitarista, el muy decente Daniel, a través de su credo libertario. respalda la legalización del consumo de estupefacientes. No comparto en absoluto su tesis pero, hombre inteligente, más adelante entenderá que se trata de un irracional suicidio social.

María Elisa Uribe, economista de la mejor universidad del país, nuestra alma mater de Los Andes, tiene una fecunda carrera compenetrada con los sectores privado y público desde la óptica financiera. Se ha dedicado a estudiar con cuidado el impacto de la Ley 1606 de 2012 que establece el Sistema General de Regalías por virtud de la cual Bogotá recibirá casi 300 mil millones de pesos. Cerca, como ha anotado la candidata, de la tercera parte del cobro por valorización y de un valor comparable al costo estimado de la construcción de las líneas de cable aéreo en el sur de nuestra ciudad.

Bogotá tiene que proyectarse como la región del gran Bogotá que incluye los municipios circunvecinos, como existe la entidad territorial del gran Amsterdam, Gran Buenos Aires o Gran Londres de manera que se haga un manejo más eficaz y aprovechamiento equitativo de los recursos. Pronto serán 20 años que la Comisión de Ordenamiento Territorial, en la administración Gaviria, hizo estudios profundos que sólo después de muchos años se vieron plasmados en parte en la Ley Orgánica que sacó adelante hace tres años el ministro del Interior Germán Vargas.

La capacidad de ejecución que tenga el Distrito está ligada a su reformulación como entidad  territorial y a este tema  le ha dedicado estudio serio María Elisa Uribe.

Con buenos y malos candidatos al Senado, para mí la única opción es el voto en blanco. Es necesario llamar la atención de ese engendro de la circunscripción nacional, otro error más de la Constitución de 1991. Por vía de esta figura la Cámara alta se divorció de lo que le pertenece desde que se estableció en la historia la democracia representativa: la representación de las regiones que hoy es amorfa y desequilibrada.