LORENA RUBIANO FAJARDO | El Nuevo Siglo
Domingo, 27 de Mayo de 2012

Cunde el pánico

 

Epígrafe

“La nacionalidad no aspira ni a la libertad ni a la prosperidad, sino que, si le es necesario, no duda en sacrificar ambas a las necesidades imperativas de la construcción nacional”.

Lord Acton

 

El miedo silenciosamente anda entre los colombianos y no deja ver sino caras cabizbajas y rostros de preocupación recorriendo las calles de ciudades y campos, pensando en que nuestra querida patria va para atrás.

Los jóvenes sentimos que nuestros gobernantes y dirigentes van a ser incapaces de dejarnos un país en paz, con progreso dentro de un desarrollo sostenible.

En mi concepto, y dicho de la forma más desapasionada pero sí con preocupación, estamos pesimistas frente a la posibilidad de la reconciliación entre hermanos de patria.

Y pocas voces se oyen protestando por los infames y horrendos atentados de la guerrilla contra inermes ciudadanos, o contra la Fuerza Pública o contra personalidades de la política, como en el caso de Fernando Londoño Hoyos, deberíamos haberlo rodeado con más ímpetu y con más energía para demostrarles a los violentos, vengan de donde vengan, que no los dejaremos destruir nuestra amada nación.

Pero, además, por todo lado se oyen voces de preocupación, amenazas contra más de 300 alcaldes, según informa el presidente de la Federación de Municipios, Gilberto Toro. Para el Centro Seguridad y Democracia de la Universidad Sergio Arboleda dirigido por Alfredo Rangel, “en relación con años anteriores, durante el primer trimestre de 2012 se sigue evidenciando un deterioro de la seguridad nacional”.

Según el documento, “el deterioro se evidencia en la persistencia del incremento de las actividades violentas de los grupos armados irregulares”, y en la constante caída del número de combatientes por parte de las Fuerzas Militares. A esto le agrego el aumento de la delincuencia urbana y condeno toda clase de violencia, especialmente con la nueva modalidad del uso de ácidos.

De manera que, frente a este panorama, el final de esta crisis no está a la vuelta de la esquina, a pesar de los esfuerzos de nuestras autoridades militares y policiales y el gran número de sacrificios de vidas por defender la institucionalidad. El presidente Juan Manuel Santos volvió a advertirles a los terroristas de derecha y de izquierda que “sus actuaciones no lograrán mover al Gobierno del rumbo que tiene fijado”. Este es un reto de los delincuentes y terroristas contra toda la sociedad, por eso debemos asumir el desafío y apoyar sin distingos políticos la pacificación del país.

lorenarubianof@gmail.com