El Gobierno ha sido muy hábil para evadir su responsabilidad en los casos de corrupción que involucran a altos funcionarios de la Administración Santos y a la multinacional Odebrecht. Han logrado centrar la atención en la campaña, del entonces candidato opositor, Óscar Iván Zuluaga. Esta situación ha sido utilizada por el Gobierno y los medios de comunicación para cuestionar el proceder del Centro Democrático y para sacar de la contienda electoral al Dr. Zuluaga.
La corrupción de Odebrecht es un fenómeno regional, se habla de cerca de 800 millones de dólares en sobornos en todo el continente. En Brasil compraron a Lula y a Dilma, en Perú a Toledo, en Colombia a las ministras Parody y Álvarez y está por verse si a Santos.
La multinacional brasilera obtuvo, durante el Gobierno Santos, una adhesión a su contrato de la Ruta del Sol fase II (Otrosí 3), por cerca de un billón de pesos, decisión que benefició a la familia de la ministra Parody, concesionarios del puerto de Gamarra. Al parecer, gracias a la gestión de su pareja, la entonces Ministra de Transporte Cecilia Álvarez Correa, lograron que se construyera una carretera hasta dicho puerto. Para lograr el Otrosí 3, que benefició a la familia Parody, la multinacional pagó un soborno por 4,6 millones de dólares. Frente a este caso, ya hay personas, cercanas al gobierno, capturadas y que han confesado su participación en los hechos.
Adicionalmente, y gracias a una denuncia del senador Jorge Enrique Robledo, las autoridades están investigando un préstamo, del año 2015, por 120.000 millones de pesos del Banco Agrario a Odebrecht, después de que la Superintendencia de Sociedades le decretara la causal de disolución a la filial de la firma brasilera en Colombia. Estos hechos se han confirmado, falta que las autoridades den con todos los responsables y los sancionen de manera ejemplar.
Mientras esas investigaciones avanzan, salió a la luz pública una entrevista en Brasil del estratega político Duda Mendoça, donde afirma que Odebrecht le pagó parte de la asesoría que le prestó a la campaña de Zuluaga en 2014. Sin haber pruebas en contra del candidato del Centro Democrático, más allá de dicha entrevista, el Gobierno y los opositores del Centro Democrático, han decidido condenarlo para sacarlo de la contienda presidencial del 18.
Pero ¿Por qué Odebrecht habría de pagar 2 millones de dólares a Duda, a favor de Zuluaga, cuando Santos ya había resultado reelecto y no podían obtener ningún beneficio de su parte? Para Odebrecht, incluso podía resultar contraproducente aparecer como financiador de la campaña de Zuluaga ante el gobierno Santos, del cual estaba recibiendo numerosos beneficios.
A Óscar Iván Zuluaga hay que garantizarle su derecho a la presunción de inocencia. Ya fue víctima del montaje del hacker, lo que le costó la Presidencia de la República, hechos por los cuales la Fiscalía archivó la investigación en su contra. Ahora, cuando se perfila como el más opcionado candidato para ganar las elecciones del 2018, aparece este nuevo escándalo.