18 años de La Gata Cirko: una fiesta de danza, teatro y acrobacias | El Nuevo Siglo
Hasta el 27 de este mes la agrupación circense presentará en plataformas digitales las piezas ‘La esperanza’, ‘Desde adentro’ y ‘Pensamientos nocturnos’.
Foto cortesía
Lunes, 7 de Diciembre de 2020
Redacción Cultura

La Gata Cirko, considerada una de las mejores compañías exponentes de una nueva cultura circense en Colombia, celebra 18 años de fundación con una apuesta entre lo poético y lo acrobático a través de tres nuevas producciones donde indaga sobre nuevas posibilidades narrativas, formatos y plataformas.

Bajo la dirección general de Felipe Ortíz y la producción de Luisa Montoya, desde este miércoles hasta el 27 de este mes, el público podrá conocer las historias de La esperanza, ganadora de la beca de creación del Ministerio de Cultura y la beca de creación el arte circense de Idartes; Desde adentro, ganadora de la beca el arte y la cultura se quedan en casa del SCRD y Pensamientos nocturnos en alianza con Canal Capital.

El circo ha experimentado un amplio movimiento de renovación y ruptura entre lo clásico, lo tradicional y lo moderno. Esta etapa donde se instalan las producciones de la Gata Cirko, mantiene aquellos elementos que exaltan las habilidades acrobáticas de cada uno de los intérpretes, pero además incursionan en elementos de la danza y el teatro.

Convertir las técnicas circenses en herramientas narrativas es la búsqueda de la compañía dirigida por Felipe Ortíz y Luisa Montoya, quienes comparten escenario con un grupo de artistas multidisciplinarios y de gran trayectoria. Su estilo se basa en conservar las acrobacias del circo tradicional, actividades aéreas, de manipulación y equilibrios, con personajes emotivos y en constante evolución.



Las piezas que conforman esta temporada fueron creadas desde diferentes perspectivas, pero con el firme objetivo de lograr una narrativa donde el lenguaje del circo conviva con el lenguaje cinematográfico. Desde adentro, es una coproducción de La Gata Cirko y Páramo Films, la cual estará disponible hasta el 11 de este mes, en el canal de YouTube CGCjaverianaEnlace.

La obra narra la historia de dos amantes, un grupo de amigos y un hombre solitario que conviven en una casa durante el confinamiento. El prolongado encierro de la cuarentena pone al límite su naturaleza humana, revelando múltiples matices de sus relaciones.

Inspirado en el teatro del absurdo, La Esperanza, cuenta la historia de un grupo de personas en medio de una pandemia que lleva muchos años, quienes han desarrollado varias estrategias absurdas de supervivencia que les han permitido sobrevivir y permanecer alejados del virus.

En un escenario casi post–apocalíptico, la pieza toma elementos de la danza contemporánea, el teatro físico y las técnicas de circo. “Partimos de la exploración de cinco personajes, cada uno inspirado en diferentes etapas de la evolución humana. También fue muy importante las técnicas de circo que íbamos a usar y como ellas podían convivir en la escenografía que creamos, un gran edificio donde esta comunidad habita desde un tiempo indefinible” afirma Montoya. Esta pieza de nuevo circo, en formato digital estará en temporada todos los domingos hasta el 20 de este mes, en el canal de YouTube de La Gata Cirko.

Para terminar el mes, llega Pensamientos Nocturnos, en trasmisión especial por Canal Capital del 25 al 27. Una pieza que busca explorar los mundos internos de personajes inspirados por algunas obras modernistas del pintor estadounidense Edward Hopper.

“Fue un proceso de creación delicioso. Sin pretensiones, sin afanes, con mucho tiempo de juego y exploración. Todo empezó en medio del confinamiento, cuando conseguimos el permiso para poder entrenar, nos reunimos con un pequeño grupo de artistas de la compañía. Del entrenamiento pasamos a la creación; seleccionamos los cuadros que más nos inspiraban o que conectábamos con ciertas técnicas de circo. Luego indagamos en los personajes, ¿qué pueden estar sintiendo? ¿qué nos evocan? ¿por qué los cuerpos parecen desconectados de cualquier impulso de vida?” comenta el director.

Tras esta exploración los personajes fueron llevados a situaciones particulares, pequeños momentos antes o después de la imagen del cuadro, como si se les diera vida por unos pocos minutos y después volvieran a estar encerrados en la pintura, congelados en el tiempo para siempre.