‘Ciclos de Vida’, maternidad desde el arte de Juliana Bernal | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Martes, 24 de Noviembre de 2020
Redacción Cultura

La Galería Otros 360 Grados acoge en su sala Ciclos de Vida, la exposición de la artista bogotana Juliana Bernal, proyecto que propone una serie de relaciones visuales y espaciales a partir de la experiencia vital de la maternidad.

La muestra, que se podrá visitar de forma presencial, estará abierta al público en el horario habitual de lunes a viernes de 10:00 a.m. a 6:00 p.m. y los sábados de 10:00 a.m. a 4:00 p.m. en la calle 70A # 11-38. También se podrá disfrutar a través de las redes sociales, buscándola como “@Otros360” y por la página web www.otros360grados.com.

La exposición contará con más de 15 obras de diferentes formatos en papel cortado, hojilla de oro y gaza que exploran la simetría, la escala cromática y la forma, a través del ejercicio del doblez y el tramado de cada pieza de papel, formando volúmenes geométricos que se traducen al lenguaje afectivo del cuidado, la espera y la unión que hay entre una madre y su hijo.

Las composiciones de Bernal se definen en el ritmo, las secuencias y las gradaciones cromáticas. Este lenguaje visual es el resultado de la transposición de su devenir emocional y de la exploración consciente de su lugar enunciativo como madre. Las formas derivadas evocan en el espectador la experiencia propia del vínculo y el recogimiento, y despiertan un efecto cinético que sugiere movimientos cíclicos o en espiral. El concepto del ciclo, precisamente, recorre el trabajo de la artista como símbolo del transcurso de la vida y de su gravitación incesante sobre los individuos.

El lenguaje visual en la obra de la artista es el resultado de su devenir emocional y de la exploración consciente de su lugar como madre y de su experiencia de gestación, enlazado con su propio hijo en un entorno compartido por ambos. De esta manera, está presente en la muestra la evocación simbólica del nido y de su condición de protección y demarcación del espacio íntimo como territorio único de los dos.

Los colores son simbólicamente enmarcados en la creación, los tonos primarios aluden al origen y la fuerza de la vida; amarillos y dorados que sugieren la luz, el valor y la belleza. Estos matices se complementan con tonos terrosos que hablan del arraigo, lo acogedor y lo natural; y de blancos, que simbolizan lo espiritual, el comienzo y la renovación.