Colombiana expondrá en pabellón del Vaticano | El Nuevo Siglo
Jueves, 9 de Abril de 2015

La artista colombiana Monika Bravo, cuya obra se inspira en tejidos, colores y formas ancestrales de su país, ha sido invitada por el Vaticano a la 56ª edición de la Bienal de Arte de Venecia que se inaugura el 9 de mayo próximo.

 

Además de la colombiana fueron invitados otros dos jóvenes artistas, la macedonia Elpida Hadzi-Vasileva y el mozambiqueño Mário Macilau, quienes exhibirán con obras totalmente contemporáneas su propia visión del Nuevo Testamento.

Bajo el lema "En principio el verbo se hizo carne", del Evangelio según San Juan, el Vaticano seleccionó a tres artistas provenientes de diferentes continentes, entre ellos dos mujeres, pertenecientes a las nuevas generaciones y que aportan su propia visión del mundo de hoy.

"También ofrecen su mirada femenina", comentó Micol Forti, responsable de la sección arte contemporáneo de los Museos del Vaticano.

 

Se trata de la segunda vez que el Vaticano participa con un pabellón en la cita más importante del arte contemporáneo de Italia, que reúne en Venecia a más de 100 artistas de más de 80 países. 

Las obras, realizadas con materiales y técnicas diferentes, han sido montadas con distintos sistemas multimediáticos, imágenes, proyecciones, inclusive objetos recuperados.

Bravo, nacida en Bogotá en 1964 y residente en Estados Unidos, empleará seis paneles transparentes sobre paredes coloreadas en los que proyectará a través de métodos tecnológicos paisajes y formas geométricas, logrando así espacios y abstracciones. 

 

Mário Macilau, fotógrafo, promete en cambio destapar "lo que no se quiere ver" gracias a sus fotografías en blanco y negro de niños africanos y desamparados. 

Vasileva unirá tecnología con habilidad artesanal en sus instalaciones realizadas a partir de materiales provenientes del uso diario.

Las obras permanecerán expuestas por seis meses en los enormes y sugestivos espacios del Arsenal y el costo de la operación será de 400.000 euros, financiados todos por patrocinadores privados.

 

"Con su participación la Santa Sede muestra su voluntad de diálogo e intercambio cultural con el mundo del arte presente", reconoció Paolo Baratta, presidente de la Bienal.

El ministro de la Cultura del Vaticano, el cardenal Gianfranco Ravasi, invitó a los artistas a trabajar libremente en torno al tema del Antiguo Testamento.

La Iglesia apuesta por el arte contemporáneo como una invitación a admirar la belleza.

 

"No es un compromiso de príncipes del renacimiento sino un empeño de nuestros tiempos con el papa Francisco, porque la belleza tiene que ser dada también a los pobres y no solamente la comida", aseguró el cardenal, refinado intelectual y apasionado de cine.