Comedia negra y ballet, novedades escenicas | El Nuevo Siglo
Lunes, 30 de Enero de 2012

Una selección de distintas obras del mundo llegará a Bogotá del 23 de marzo al 8 de abril para hacer disfrutar a los capitalinos de todo tipo de cultura.

Dramas contemporáneos, flamenco, humor negro, pero sobre todo mucha diversión, harán parte del Festival Iberoamericano de Teatro, el cual contará con montajes de alta calidad, los cuales no se puede perder.
Obras de Bélgica, Eslovenia, Francia, Estados Unidos, España, Australia, Israel, Suiza, Chile, México y Japón se robarán los aplausos y las emociones de los asistentes al Festival. En total los organizadores hicieron una selección de 16 puestas en escena, las cuales son un reflejo del arte mundial.

Las obras que se robarán el show son:
Gemelos (Chile): Una conmovedora historia, narrada en una novedosa propuesta que combina técnicas del teatro y la cinematografía. Así, los actores con sus máscaras se confunden con los planos proyectados dando la sensación de asistir a una película de la que se alcanza a sentir hasta la respiración de los personajes.
Incendios (México): Basada en la obra homónima de Wajdi Mouawad, que dio título también a una laureada película. Producida por el reconocido actor Diego Luna junto a Sebastián Sánchez de Tapioca Inn, esta pieza propone un viaje a Líbano, donde los protagonistas tendrán un encuentro con su pasado, su presente y su futuro. Una obra de gran fuerza dramática, soportada por el extraordinario trabajo de los actores y por una escenografía vinculante.
1894 (Estados Unidos): Llega quien sin duda es una de las personalidades de más renombre en este Festival, el reconocido y respetado actor, director, guionista y defensor de los derechos humanos y de las libertades civiles Tim Robbins. Con su compañía The Actors Gang, una de las más importantes de Estados Unidos, trae una electrizante, perturbadora, vital y aclamada versión de la novela de George Orwell.
Ballet Trockadero de Monte Carlo (Estados Unidos): Una extraordinaria propuesta en la que bailarines hombres interpretan todos los roles de algunas de las piezas más representativas del ballet clásico. Sin embargo hay que subrayar que los integrantes de este Ballet provienen de la escuela clásica y mantienen la perfección y técnica en sus interpretaciones. Apoyados en un inteligente sentido del humor, hacen de sus montajes una suerte de parodia, que incluye gags, errores premeditados y actuaciones desmedidas.
32 Calle Vandenbranden (Bélgica): Una cantante de ópera, cinco talentosos bailarines y dos bailarines japoneses, uno de ellos especializado en difíciles técnicas corporales, recrean 32 Calle Vandenbranden. Esta impactante propuesta plástica, de atmósfera inquietante y sonidos hipnóticos, es de la compañía Peeping Tom. Este ha sido uno de los espectáculos más exitosos de la escena europea en los últimos años.
Cuando estaba muerto (Eslovenia): Quienes tengan afinidad por el cine mudo no pueden dejar de ver esta puesta en escena enmarcada en un juego de ajedrez y totalmente monocromática, dirigida por Diego de Brea. Con impecables interpretaciones, pocos diálogos en carteles y mucho humor e ingenio trae a escena la película muda de Ernest Lubitsch. Aquí, tanto papeles masculinos como femeninos son desempeñados por hombres.
Julio César (Francia): La clásica historia regresa esta vez de la mano del Centro Dramático Nacional de Francia dirigida por un joven talentoso que en los últimos tiempos ha adquirido gran respeto en el campo teatral europeo: Arthur Nauzyciel. El elenco está conformado por actores del American Theater de Boston, y con refinamiento en toda su puesta se recrea la muerte de Julio César de una manera memorable, superando las anteriores versiones y acercándose a la grandiosidad de la historia.