Cómo preparar papas fritas crujientes y jugosas | El Nuevo Siglo
Ají molido, pimentón, curry, perejil y ajo seco les dan un sabor extra a las papas crocantes.
Maizena
Viernes, 18 de Agosto de 2023
Redacción Cultura

Hoy se celebra el Día Mundial de las Papas Fritas, uno de los pasabocas más deliciosos y populares en todo el planeta y un plato que muchas amas de casa quisieran aprender a preparar.

Este platillo, así como las asadas al horno, han sido para los colombianos uno de esos manjares que se pueden disfrutar con recetas de hamburguesas caseras, con pescado, huevos o con cualquier tipo de salsa.

En el fondo, lo que se trata de conseguir son unas papas muy crujientes en su exterior y jugosas y algo cremosas en su interior. Para lograr esas papas perfectas, se deben freír en dos tiempos y en dos temperaturas diferentes, aunque hay otros factores que también pueden influir en el resultado.

Cómo preparar las mejores papas fritas del mundo:

Las papas

Obviamente, en la elaboración de esta receta es importante la elección del ingrediente principal, la papa. Para hacer papas fritas, las mejores variedades son las Monalisa y la Kennebec (una variedad de papas blancas), entre otras. Por lo menos, hay que comprar unas que sean para freír y no de las variedades que resultan mejores para cocer o guisar.

Para prepararlas, se empieza por lavarlas y pelarlas. Luego cortarlas en varitas de un centímetro de grosor aproximadamente.

El remojo

Una vez picado el tubérculo, se recomienda dejarlas en remojo en un plato hondo. Así se evita que se pongan marrones como consecuencia de la oxidación, y además se le elimina parte del almidón, evitando así que al freírse se peguen unas a otras.

El dejar en remojo las papas antes de freírlas es opcional, pero se recomienda dejarlas bajo el agua por un lapso de 15 minutos, lo cual es suficiente para eliminar la mayoría del almidón.

La sal

Aunque siempre es mejor dejar las patatas un poco sosas y añadir la sal al final cuando ya están fritas y crujientes, es preferible espolvorear ligeramente las patatas tras su remojo con un poco de sal fina.

Este es el momento en el que se le pueden agregar tres cucharadas de maizena para que queden más crujientes. Luego se retiran y se procede a echarlas al sartén con el aceite.

Una vez fritas, se prueban y se espolvorea más o menos otra cantidad de sal sobre las papas en función de cómo hayan quedado. Normalmente será suficiente con añadir un pellizco sobre las papas terminadas.



El aceite

Para darles un sabor diferente se recomienda freír las papas en aceite de oliva extravirgen o aceite de girasol para esta preparación. La fritura debe hacerse en dos tiempos, a dos temperaturas.

Para freír bien las papas son necesarias dos sartenes, una para la primera parte del proceso, en la que se fritan las varitas de patata a 140 ºC durante unos 7 u 8 minutos, y otra para la segunda fase, en la que se doran y se dejan crujientes friéndolas a 190 ºC durante unos cinco minutos más.

Hay quien recomienda una fase intermedia entre las dos frituras, en la que se meten las papas prefritas en el congelador durante unos 30 minutos para después terminarlas en la fritura a alta temperatura.

El choque de temperatura, al meter las papas en la segunda sartén hace que estas además de crujientes queden algo cuarteadas en su exterior, lo que incrementa la sensación de crujiente. Por dentro siguen estando blanditas, como confitadas, gracias a su paso por la primera sartén.

El escurrido

Las papas fritas guardan muy bien el calor. Por eso no hay problema en dejarlas reposar sobre papel absorbente de cocina para retirar el exceso de aceite que puedan haber retenido. De todas formas, con esta técnica, en la fritura final a alta temperatura o "deep fry", las papas absorben menos aceite que si se hace progresivamente subiendo el fuego.

Datos curiosos

Las papas fritas son también conocidas en otros países como patatas fritas, papas a la francesa o patatas a la francesa.

Se estima que el origen de las patatas fritas se remonta al siglo XVII, debido a que los belgas las usaban como sustitutos del pescado frito cuando los ríos se congelaban en época de invierno.

En la Ciudad de Brujas (Bélgica) existe un Museo de la Patata Frita, denominado "Friet Museum".

Según el Libro Guinness de Récords Mundiales, la orden de papas fritas más grande de la historia pesó 454,95 kilos. Fue preparada por Twin Oaks Farms en Eagle (Idaho), el 20 de septiembre de 2014.

Muy al contrario de lo que se piensa, las patatas fritas son saludables, debido a que son una fuente de fibra y potasio.

En 1920 se inventó la primera máquina mondadora de patatas, que las cortaba de manera rápida y uniforme.

Las papas fritas contienen una gran concentración de acrilamidas, un compuesto químico que se forma cuando el almidón que se encuentra en las papas alcanza grandes temperaturas.

El término "French Fried Potatoes" se publicó por primera vez en Inglaterra en el año 1856, en el libro Cookery for maids of all work, de Eliza Warren.

Las papas fritas se introdujeron en América en el año 1801, gracias al presidente estadounidense Thomas Jefferson. Sorprendió a sus invitados con este alimento durante una cena en la Casa Blanca.

Estados Unidos es el mayor exportador de productos de papa procesados. Se estima que Bélgica es el país que más consume papas fritas.