La obra del colombiano Andrés Santo Domingo Flórez, un artista que suma una trayectoria de 30 años con exposiciones individuales y colectivas tanto en el país como en el exterior, será acogida en las salas de la Galería Acero.

Este artista bogotano de fina y depurada técnica, manejo equilibrado de la cromática y amor por su trabajo, proyecta y ofrece para esta oportunidad un diálogo con paisajes mitológicos que no están propiamente enmarcados dentro de un realismo, sino que son mundos de otras dimensiones en profundos escenarios de la imaginación, que se desbordan y que conectan de alguna forma y de manera figurativa con el espacio real.

Ha contado, entre otros, con el acertado concepto del reconocido historiador, crítico de arte y curador colombiano Álvaro Medina, y actualmente su obra es representada por una importante galería de arte londinense y en Colombia por Acero Galería, en donde se llevará a cabo la exposición individual “Encuentros con el Alma”, que estará abierta desde este mes hasta el 13 de abril.

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“No saber por qué pinto es lo que me hace pintar. Empecé en un momento de absoluta rebelión del alma y descubrí pintando, una manera ‘razonable’ de vivir completamente al margen de la razón. Eso sí, tuve que ser filósofo, tuve antes que tocar flauta traversa, tuve antes que casarme y tener hijos y vivir como todos para necesitar romper los valores éticos y perfectos, para buscar aquellos estéticos e imperfectos pero auténticos y míos, que son los que me hacen pintar”, señaló el artista.

Para Santo Domingo pintar se convierte en una manera de volver en el tiempo para ser niño de nuevo. “Definitivamente soy niño y mientras más pinto y más viejo me hago, más niño. Tal vez por eso mis grutas; al final de las grutas encuentro mi niño, el mismo que me hace volver a pintar desde el más lúdico sentir, el que me hace probar los colores, descubrir texturas, sin miedo a untarme de ellos, sin pensar si unto el piso o las paredes o el lienzo. El que hace barcos de papel, el que raya, el que describe momentos inconscientes... los mismos que presiente el que mira mis cuadros”, comentó.