La poesía está en todo lo que nos rodea: Ramón Cote | El Nuevo Siglo
Foto El Nuevo Siglo - Claudia Beltrán
Domingo, 5 de Agosto de 2018
Claudia Beltrán

Dibujar el mundo a través de las palabras, adueñarse del territorio y apuntar algunos rasgos de nuestra identidad son algunas de las características de la selección de poemas que Ramón Cote Baraibar hizo para el libro Antología de la poesía colombiana contemporánea.

Con este compendio, el ensayista pretende revelar el rostro cambiante de la historia de una nación y la relación con el entorno de los autores colombianos del siglo XX y XXI, a la vez que acerca a las juventudes a la poesía.

En diálogo con EL NUEVO SIGLO, Ramón Cote Baraibar habló de la importancia de entender la poesía como ese elemento que nos rodea y que hace parte de nuestra vida diaria:

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué diferencia hay entre la Antología publicada en España y está nueva versión de Planetalector?

RAMÓN COTE BARAIBAR: La Antología de la poesía colombiana del siglo XX publicada en el 2006 forma parte de la colección “La Estafeta del Viento”, con selecciones de todos los países de América Latina. Este compendió tiene como características que fueran máximo 20 poetas con una amplia selección de poemas, o sea unos seis o siete poemas para un público lector de España y Latinoamérica. Esa cantidad es muy difícil, por lo que me tocó hacer una selección muy específica y apretada. Además, este libro debía tener un prólogo, en el que señala las características de la escritura colombiana y los grupos poéticos.

Hace un año me encargaron de Planeta hacer una Antología de la poesía colombiana reciente. Entonces yo acepté encantado porque ya sabía cómo era la cosa. Cuando la estaba haciendo me di cuenta que me estaba repitiendo totalmente. Entonces cambié de criterio. Declaré que iba a hacer una antología distinta, primero con más poetas, menos poemas y que llegara hasta nuestros días. Otra de las características es que sean muy didácticos. Esta colección está dirigida a un público juvenil, por lo cual los poemas y poetas son para acercar a la gente a la poesía. Son escritos sencillos que atrapan al lector, que se sienten a gusto con la propia poesía colombiana.

Así, mientras la primera tiene un carácter meramente histórico, la segunda aunque tiene un orden secuencial temporal, en vez de empezar a los principios de siglo lo hice como en los 40’s. Yo considero que el gran libro fundacional de la poesía colombiana moderna es “Los elementos del desastre” de Álvaro Mutis, publicado en 1953 y “Morada al sur” de Aurelio Arturo publicado en 1963, quien venía publicando poemas en diferentes revistas pero solo hasta ese año se publicó la primera edición del poemario. Entonces empecé con los hitos fundacionales de la poesía contemporánea en Colombia que son esos dos y acaba con una colombiana que vive en Portugal que se llama Lauren Mendinueta.

ENS: ¿Por qué es necesario acercar a las personas a la poesía?

RCB: La gente le tiene mucho miedo y pereza a la poesía, y si te digo la verdad con toda la razón, porque se debe a un problema fundamental que es la educación. Si tienes unos profesores de literatura que siguiendo al pie de la letra una especie de libros va dictando, no gozan la gramática y no transmiten esa pasión por la narrativa, y hablan de figuras retóricas y no te lo enseñan con emoción hace que se pierda el placer de la lectura y la escritura.

En esta antología hay poemas de los nadaístas, hay un poema de Jota Mario Arbeláez que está entero que es “Santa Librada College”, el cual habla del colegio y los profesores de física, matemáticas y religión. Entonces mi propósito era que sintieran que la poesía está mucho más cerca de lo que la gente cree que es. Las personas consideran que la poesía es una cosa etérea, que solo habla de arreboles, del más allá, de la muerte y la tristeza. Resulta que la poesía es una cosa totalmente distinta, la lírica está donde uno quiere que esté.

ENS: ¿Se podría decir que el compendio es una serie de sentimientos que lo transportan a la época escolar?

RCB: No necesariamente, yo quería encontrar puntos de intersección con los muchachos. Ahora con el internet todo el mundo tiene una capacidad enorme de información, los jóvenes saben quién es Marilyn Monroe o actores de hace 30 o 40 años, entonces esta moda retro hace que sean figuras vigentes. Encontré ciertos vínculos para que la gente dijera mira aquí hay un poema de Elvis o Jimmy Hendrix, como una manera de ganchos que pasen de un poema a otro que les parezca atractivo. Fue una búsqueda de poemas que se sintieran cercanos a ellos y que a su vez dijeran, yo no sabía que ahí había poesía.

Quería aproximar al lector a cómo la poesía colombiana se enfrenta a su propio paisaje, con lo que quiero decir naturaleza, territorio, no solo la montaña, las aves, los ríos, sino el bus, el vendedor ambulante, el ñero, todo lo que te rodea. Cómo la poesía colombiana supo encontrar su propio panorama, como los poetas se apropiaron del sitio que habitaban. En Morada al sur por ejemplo, Aurelio Arturo que nació en la Unión Magdalena, tomó sus recuerdos, entonces habla de las vacas, de las fincas, de las perspectivas, de los árboles, de sus tías, de su nodriza, entre otros. Esta colección muestra como los autores van asumiendo ese espacio como parte vital de la lírica colombiana, cosa que ya había hecho la narrativa pero no la poesía.

ENS: ¿Qué características de la poesía colombiana se han mantenido y cuales han cambiado en el tiempo?

RCB: La poesía colombiana siempre ha sido conservacionista, no ha sido influida por las vanguardias como sí lo fue la argentina o la chilena. Mientras en otros países hay muchas voces en diferentes caminos, en Colombia han sido múltiples voces con un camino más clásico. El colombiano es más conservador y tranquilo, y eso crea una lírica distinta. Entonces la poesía pasa factura con el tiempo, lo que uno cree que es moderno muchas veces acaba siendo la trampa de la modernidad, lo que es moda es lo más anticuado. Esta antología esculca en esas variaciones más pequeñas, diversas tendencias, estilos y generaciones, en las cuales encuentras la pertenencia, la colombianidad.

Hay una nueva generación de poetas en Colombia. La cantidad de mujeres que están escribiendo en este momento es algo que nunca se había dado en la historia del país, quienes han nacido desde los ochentas para acá. La sensibilidad, el gusto, la manera de ver las cosas, la apropiación del terreno, las diversas lecturas, su manera de ser contemporáneo, la manera de enfrentarse a la vida es muy distinta, más deshilachada, más fresca pero al mismo tiempo sin descuidar. Me parece que se ha unido esa espontaneidad y frescura con trabajo y seriedad.