En poco más de cuatro años ya marca tendencia: la primera dama estadounidense Michelle Obama es garante de estilo y para los diseñadores de moda no hay mejor catapulta hacia la fama que vestirla.

Esta semana, el golpe de fortuna agració al estadounidense Reed Krakoff, cuyo vestido azul oscuro y cardigan luce en el nuevo retrato oficial de la Casa Blanca.

El presidente Barack Obama también vistió un traje de Krakoff en la toma de posesión de su nuevo mandato en enero.

"Sabía que había una posibilidad, pero no estaba seguro", dijo el diseñador a la AFP.

"Es un gran honor, es algo increíble para cualquier diseñador", añadió Krakoff.

Si bien Michelle Obama cuenta con una licenciatura en Derecho de la Universidad de Harvard, merecería un honoris causa por su gran sentido de la moda, con su predilección por las cinturas ceñidas y las siluetas clásicas, que mezcla acertadamente con colores llamativos y diseños de vanguardia.

"Ella viste moda contemporánea, a veces adelantada, pero nunca de manera que se pueda decir que es una 'fashion victim' o que luce demasiado salvaje", señala Patricia Mears, directora del museo del Fashion Institute of Technology.

Mears apunta que, si bien se decanta por diseñadores locales, también se atreve con firmas extranjeras.

La semana pasada, Michelle Obama eligió nuevamente una creación de uno de sus diseñadores favoritos, Jason Wu, para el esperado discurso anual del estado de la Unión de su marido.

La primera dama puso a este joven diseñador taiwanés en el tapete hace más de cuatro años, al vestirse con uno de sus modelos para el baile inaugural del primer mandato de Barack.

Uno de los secretos mejor guardados en Washington fue cuál diseñador se había sacado la lotería esta vez y vestiría a Michelle Obama en el baile inaugural del mes pasado.

En una decisión que sorprendió a veteranos expertos en moda, ese honor fue por segunda vez para Wu, quien diseñó para ella un sensacional vestido rojo brillante que dejaba ver sus esculturales brazos.

Pero no es sólo en el mundo de la alta costura donde ella ha dejado su marca. Michelle Obama, de 49 años, se ha hecho famosa por su habilidad para combinar estilos de alta y baja gama, juntando un cinturón de 20 dólares de J.Crew comprado en línea con un conjunto de alta costura de esa misma firma.

Para J.Crew, la asociación con Michelle Obama ha generado un inesperada ganancia de buena publicidad y un sacudón a las ventas.

"La gente se siente muy conectada con nosotros a través de Michelle Obama", dijo Jenna Lyons, directora creativa de la firma.

"Que gente fuera de Nueva York y Estados Unidos esté hablando de lo que ella está usando y reconozca a J.Crew por eso es increíble", agregó.

Y ahora sus dos hijas, Malia, de 14 años, y Sasha, de 11, también están consiguiendo entrar en el escenario, mostrando algunas de las destrezas de su madre para combinar llamativos conjuntos con toques casuales en sus recientes apariciones públicas.

Por todo ello, en la semana de la moda de Nueva York los expertos prestaron especial atención a los diseñadores favoritos de la primera dama.

Wu, aún flotando, dice que es un "honor" tenerla como seguidora de sus diseños: "Estoy muy emocionado con continuar nuestra relación por muchos, muchos años más".

AFP.