CON MÁS de 250 títulos de 60 países, hoy inicia la versión 32 del Festival de Cine de Bogotá, con el cual el país arraiga su importancia en el mundo cinematográfico, atrayendo lo mejor y más selecto de la cinematografía a nivel mundial.

En sus 32 años El Festival de Cine de Bogotá ha servido como una plataforma y vitrina para productos cinematográficos transmitiendo cada año cine argumental, cine documental, documental sobre arte y vídeo, producciones de animación y cine digital fuera de competencia. Además el Festival hace un acercamiento a la sociedad, creando categorías que buscan experimentar y analizar el mundo a través del medio ambiente, la religión y la innovación. Aunque nació con la necesidad de premiar los logros del Cine colombiano ahora se expande para reconocer el trabajo de todos aquellos que pretenden estremecer el mundo del cine a nivel internacional.

El Festival se especializa en premiar a los nuevos talentos quienes participan en el certamen con sus óperas primas, segundas y terceras películas, siendo pionero en mostrar las miradas vanguardistas y frescas sobre cómo hacer cine actualmente.

“Este año el Festival estará en 12 salas, como la Cinemateca Distrital, la Sala Fundadores, el Jardín Botánico José Celestino Mutis, el Museo de los Niños, Uniandinos, las cárceles de Bogotá, la Casa del Teatro, Calima Centro Comercial, universidades y más espacios”, dijo Henry Laguado, director del festival de cine de Bogotá 2015 a El Nuevo Siglo.

“El público podrá ver películas de países como Alemania, Argentina, Australia, Austria, Azerbaiyán, Bélgica, Brasil, Bulgaria, Cabo Verde, Canadá, Chile, China, Colombia, Corea, Croacia, Costa de Marfil, Cuba, Dinamarca, Ecuador, El Salvador, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estados Unidos, Etiopía, Filipinas, Finlandia, Francia, Georgia, Grecia, Guines-Bissau Creole, Irán, Irlanda, India, Indonesia, Israel, Italia, Jamaica, Japón, Kosovo, Macau, México, Montenegro, Nicaragua, Noruega, Palestina, Paraguay, Perú, Polonia, Portugal, Puerto Rico, Reino Unido, República Checa, República Dominicana, República Saharaji, Reunion Island, Rumania, Suiza, Taiwán, Turquía, Uruguay y Venezuela, con el fin de acercar a los conocedores y amateur, a las historias y composición cinematográfica que manejan en cada nación”, agregó Laguado.

El Festival tiene una Competencia Internacional de Nuevos Directores en Cine, quienes reciben el Círculo Precolombino, premio especial, al lado del Mejor Documental Social de Arte y del Medio Ambiente.

A nivel nacional premia la Mejor Película, el Mejor Corto y el Premio Alexis a directores menores de 18 años; al Mejor Largometraje colombiano con 30 mil dólares en equipos para su próxima película de la compañía HD Cinema Colombia; al Mejor Cortometraje Colombiano con 10 mil dólares representados en el alquiler de equipos de HD Cinema Colombia para el próximo cortometraje. Es de anotar que ya dos cortometrajistas colombianos han hecho uso de este premio.

Este año el Festival cuenta con una selección de películas que integran categorías como palestinas, que como su nombre lo dice pertenece a este país, siendo el invitado especial de este evento. Selección oficial documental social competencia, en el cual participan directores destacados como Carolina Astudillo y John Petrizzelli. Selección oficial documental sobre arte "Enrique Grau", en el cual compiten cintas de Colombia, Brasil y Cuba. Selección oficial documental medio ambiente competencia con títulos como La laguna yCarta incógnita. Otras como Animación, Cine Internacional, Cine Sagrado y Cine para ciegos, siendo una novedad en esta edición.

Así mismo, el Festival seleccionó y restauró el filme colombiano El Río de Las Tumbas del director Julio Luzardo para ser audiodescrita por el equipo de ATmedios. Esta película fue estrenada en 1965, y trata del retrato de la vida de una población¸ situada a la orilla de un gran río¸ cuyo ardiente clima sofoca a sus habitantes durante todo el año. Tanto los que allí viven de manera permanente, como los eventuales visitantes, se contagian de una soporífera condición que los hace indolentes frente a todo lo que sucede a su alrededor. Ni siquiera la aparición de cadáveres flotando en el río, logra conmocionar realmente a estos personajes: cada quién presencia este violento panorama con la indiferencia correspondiente. “Guakayo”¸ nombre indígena del río Magdalena¸ fue el título del trabajo que se le asignó al proyecto durante el rodaje.

“El Río de Las Tumbas fue elegida para ser restaurada, puesto que recoge un entonces joven talento colombiano, además de una historia simple y de complicidad, con muy buena retórica cinematográfica, importante para los estudiantes y jóvenes interesados en cine colombiano. Definitivamente, una cinta que no podía faltar en este festival”, explicó el director del Festival.