Picante, el nuevo ingrediente favorito de los hogares colombianos | El Nuevo Siglo
En Colombia se cultivan cuatro tipos de ají, especialmente en Valle del Cauca, Magdalena, Bolívar y Córdoba. Cada vez más se incrementa su consumo en preparaciones dulces y saladas.
Foto archivo
Viernes, 20 de Noviembre de 2020
Redacción Cultura

El picante es uno de los productos más utilizados para acompañar las comidas alrededor del mundo, gracias a su característico sabor y a las propiedades que aporta al metabolismo. Colombia no es ajena a esto pues la producción de ají destaca en la región con alrededor de 30 mil toneladas anuales.

Así mismo, acorde a información recogida por Colombina, las ventas en kilos en la categoría de picantes en el país registran un incremento de cerca del 10%, gracias a las preferencias del consumidor por este tipo de condimento y a la apuesta de las marcas por diversificar su oferta.

En el país, Valle del Cauca, Magdalena, Bolívar y Córdoba, son algunos de los departamentos que lideran su producción y dentro de la variedad que se cultiva localmente, se destaca el ají dulce, cayena, tabasco, habanero y jalapeños, entre otros.

Pero, ¿cuál es la magia del picante y qué lo está haciendo tan atractivo para los hogares colombianos? Según Lina Jaramillo, gerente del negocio de salsas y conservas de Colombina, “el consumo de picantes en el país viene creciendo en los últimos años gracias a la evolución y desarrollo de la cocina colombiana, a que el consumidor, a raíz de la pandemia, está cocinando más en casa y tiene en cuenta este condimento en sus recetas”.

Variedad de sabores

En el mundo, las cinco variantes de sabor preferidas son el Chili, el Habanero, el Jalapeño, el Chipotle y el Sweet chilli. Dentro de estas, el Chipotle es una de las opciones más populares en el país, ya que se puede combinar con otros sabores y potenciar esa experiencia. Conozca las diferencias y características de algunos de los ajís que se cultivan en el Colombia:

Ají jalapeño

En una escala del uno al 10, su nivel de picante es seis, su color es verde y mide aproximadamente de cinco a siete centímetros de alto. Este tipo proviene de la especie Capsicum Annuum y se cultiva en su mayoría en el Magdalena y en el Valle del Cauca. Para las preparaciones se usa de varias formas: cocido, crudo o seco, que es el que se convierte en chipotle.

Tabasco

El tabasco tiene la ventaja de ser un condimento que se ajusta tanto a lo dulce con snacks, como pasteles o brownies, y a lo salado con salsas o pastas. De la especie de Capsicum frutescens, este tipo de ají es de tamaño pequeño y se produce en regiones como Sucre, Córdoba, Atlántico, entre otros más.

Habanero

Se caracteriza por tener una textura suave, ser de tamaño pequeño y de un color anaranjado, además de ser de la especie Capsium chinese. Considerado uno de los más picantes, se consume en salsas o encurtidos y su principal productor es el Valle del Cauca.

En el país, uno de los grandes productores de esta variante es Colombina, a través de Amazon Pepper, la cual está presente en más de 25 países y exporta el 95% de sus productos, hechos con ajíes cultivados en el Valle del Cauca.

A diferencia de otros fabricantes, el proceso de creación del chipotle que realiza la compañía consiste en cinco pasos, que se resumen en la realización de un proceso de ahumado por difusión, en donde se le adiciona humo líquido a la salmuera donde está el jalapeño por 45 días, posteriormente se deshidrata para que tenga ese sabor de cocinado y, finalmente, se pasa al molino para realizar el puré, que es la base para crear la salsa.

 “Este es un proceso natural, sin colorantes ni saborizantes artificiales, lo que permite producir un chipotle de mayor calidad, que realza el sabor de los alimentos y brinda unas experiencias de sensaciones agradables y diferentes a lo común. Es por esto que decidimos utilizar este producto para incluirlo en la nueva línea de salsas de tomate y mayonesa chipotle, que son producidas con materia prima local y con la que esperamos conquistar ese segmento de mercado de picante suave”, señala Jaramillo.

Beneficios del ají

Según Lina María Valencia, nutricionista dietista de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, Magíster en Epidemióloga de la Universidad del Valle, ponerle picante a la vida tiene beneficios como:

  • La Organización Mundial de la Salud ha determinado que la tasa de mortalidad por diferentes tipos de cáncer es menor en países culturalmente consumidores de picante en comparación con otros países con dietas diferentes. Su gran contenido de antioxidantes ayuda a proteger las células de daños causados por diferentes agentes tóxicos como el cáncer.
  • Se ha identificado poder antioxidante en el fruto del ají, esto gracias a su contenido de polifenoles y antocianinas, nutrientes que le dan al fruto sus colores vivos.
  • Tiene un efecto digestivo, ya que su consumo está relacionado con el aumento en la producción de saliva y jugos gástricos. Además, diferentes estudios han encontrado que la ingesta de capsaicina (responsable del sabor picante), incrementan el gasto de energía, duplica la producción de calor en las personas y por tanto la quema rápida de calorías, por lo que también es un excelente aliado para bajar de peso. 
  • A la capsaicina presente en el ají también se le atribuyen propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas.
  • Aumenta el flujo sanguíneo y se le reconoce por ser afrodisiaco.

Para aprovechar sus propiedades nutricionales este alimento se puede consumir en diferentes preparaciones: como salsa para carnes, sándwiches, hamburguesas, arroces, pollo, comida de mar, preparaciones típicas como empanadas, arepas, entre otros más.