Sin importar el torneo o la instancia que sea, siempre que Boca Junior y River Plate se enfrentan, el espectáculo está garantizado, especialmente por el ambiente que lo antecede, el público en las tribunas, en este caso de La Bombonera, y la rivalidad deportiva que históricamente han tenido.

Al considerado “superclásico”, no del fútbol argentino sino a nivel mundial, los protagonistas llegan igualados en puntos, 29, en una liga que tiene como punteros a Gimnasia y Esgrima de la Plata y a Atlético Tucumán.

Luego de 17 fechas, el certamen está dominado por la paridad, con el ‘Lobo’ y el ‘Decano’ al tope con 33 puntos, mientras que Huracán y Godoy Cruz (31) son los perseguidores más cercanos. En un tercer escalón River y Boca, que buscan acortar distancia y dar pelea mientras se acerca la recta decisiva.

Los ‘Xeneizes’ y los ‘Millonarios’ llegan con estadísticas similares en sus últimas seis presentaciones en el torneo local: cuatro victorias y dos empates. Y, por si fuera poco, en ese periodo ambas escuadras cosecharon un triunfo más en la Copa Argentina.

Tras un arranque de campeonato muy irregular, con varias derrotas impensadas, tanto River como Boca, los dos equipos más populares de Argentina, parecen haber encontrado el sendero para ser protagonistas de la Liga.

Sin embargo, todavía no dependen de sí mismos para llegar a lo más alto, y este superclásico asoma como un examen de carácter para unos y otros.

En su casa de La Bombonera, Boca intentará hacerse fuerte y estirar la racha de seis partidos sin caídas que lleva en el campeonato, con tres victorias en fila que lo volvieron a posicionar entre los primeros, aun cuando todavía no termina de convencer con su juego y viene de sufrir la pérdida del colombiano Sebastián Villa, una de sus figuras, operado en la rodilla izquierda.

River coincide en un camino en ascenso, con cuatro victorias y dos empates que lo devolvieron a la pelea por el título, aunque los dirigidos por Marcelo Gallardo parecen mostrar una propuesta más aceitada, a despecho de algunas bajas por lesión.

“El partido será clave, de acuerdo con las expectativas que tenemos los dos equipos de prendernos en la pelea, pero no va a ser definitorio. Sí va a ser un gran aliciente para aquel equipo que se pueda imponer y mirar con mejor expectativa el torneo”, evaluó el ‘Muñeco’ Gallardo, con una vasta experiencia en superclásicos tras sus ocho años como técnico de River.

Para este compromiso, Boca volverá a contar con su público en un superclásico, lo que no sucedía desde antes del comienzo de la pandemia de covid-19.

Se prevé que más de 50 mil espectadores colmarán el estadio, con un operativo de seguridad que incluirá 1.200 policías.

El centenario historial entre ‘xeneizes’ y ‘millonarios’ abarca 212 cotejos oficiales, con 77 victorias de Boca, 70 para River y 65 empates.

No importa

No es solo en el derbi Boca-River que el presente es lo que menos cuenta. Lo importante es la rivalidad histórica que han tenido, el morbo que encierra y lo que representa para cada uno de los protagonistas.

No hay que olvidar que generalmente se presentan fricciones, que las acciones se calientan y que la temperatura sube en las tribunas.

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Es de esperarse que los equipos salgan a jugar, a buscar los puntos y a mostrar su mejor cara en cuanto a lo futbolístico se refiere. Sin embargo, ello no significa que en desarrollo de las acciones no se presenten acciones que deriven en choques y que alguno termine con expulsados… o los dos.

Desde diciembre del 2018, los partidos Boca Juniors-River Plate se han disputado en 10 ocasiones, con un balance parejo: dos triunfos para cada lado. Además, durante ese período, hubo un juego que fue a la prórroga, que ganaron los ‘Millonarios’, mientras que dos cruces se definieron en penales, ambos a favor del ‘Xeneize’.

Hoy el "superclásico", que ya tuvo que jugarse en Europa, concretamente en España, por la final de la Copa Libertadores, tiene el ingrediente adicional de que representa la posibilidad de mantenerse con vida en la disputa del título.

Ese factor puede servir para que los dos salgan a jugar y se olviden de las patadas, las simulaciones o que se calienten tanto que el fútbol pase a un segundo plano.

Ya no es colombiano

El partido, que en algún momento se llamó clásico colombiano por la presencia de cinco o hasta seis jugadores cafeteros en las dos formaciones, esta vez no lo será.

Con Villa lesionado y Jorman Campusano finalmente transferido, por el lado de Boca solo queda el lateral Frank Fabra, mientras que del otro lado están Miguel Ángel Borja, que es titular y en quien están depositadas las ilusiones de gol, y Juan Fernando Quintero, quien a veces es titular y a veces suplente.

Hasta hace un poco más de seis meses eran de un lado Fabra, Campusano, Villa y Cardona y del otro Santos Borré, Jorge Carrascal y Quintero.

Allí, de un tiempo para acá siempre fueron protagonistas de primer nivel los colombianos, entre ellos Amaranto Perera, Óscar Córdoba, Jorge ‘Patrón’ Bermúdez y Ricardo ‘Chicho’ Serna y por el lado de los ‘Millonarios’, Juan Pablo Ángel, Falcao García o Mario Alberto Yepes.