Con la mente puesta en pegar primero, Deportivo Cali llega la capital ecuatoriana para enfrentar a Liga de Quito, que a su vez pretende recuperar su prestigio en la Copa Suramericana, en el duelo de ida de los octavos de final del torneo.

Anhelando la gloria que consiguió en 2009, cuando se adjudicó el título del torneo, los albos deberán sortear algunos obstáculos como las lesiones de sus jugadores y un mal momento en el torneo local para sacar ventaja en casa.

El partido se disputará en Quito en el estadio Casa Blanca a partir de las 7:45 locales.

Aunque contrariados por la frecuencia con la que deberán jugar partidos de los torneos locales y de la Suramericana, los directores técnicos de Liga de Quito y Deportivo Cali afirmaron que no hay pretextos para bajar el nivel del juego en los octavos de final.

“No es excusa esto de la seguidilla, somos conscientes de que podemos pelear los dos torneos”, declaró a la prensa el estratega de Liga, Pablo Repetto, quien viene de empatar  1-1 ante Técnico Universitario en el campeonato ecuatoriano.

Para el uruguayo Gerardo Pelusso, técnico de Cali, la altura de Quito tampoco es una justificación para mostrar un pobre desempeño en el encuentro.

Por el contrario, confía en que sus jugadores podrán moverse con soltura a 2.800 metros sobre el nivel del mar de la capital ecuatoriana.

“El equipo corre, el equipo no le tiene miedo a la altura, quiere decir que hay un componente físico que funciona bien”, comentó Pelusso a la prensa.

En una entrevista con radio Área Deportiva de Ecuador, Pelusso comentó que en este partido “no hay excusas de ningún tipo. Lo único que debemos pensar es en el equipo de Liga y tratar de analizar a nuestro rival de la mejor forma”.

El camino hacia la siguiente etapa de la Copa Suramericana parece cubierto de espinas para Liga de Quito, que también fue subcampeón del certamen en 2011. Las lesiones de sus jugadores ponen a prueba el esquema de Repetto, que como un sastre debe remendar al cuadro ecuatoriano.

Liga no contará en este encuentro con el defensa uruguayo Horacio Salaberry, quien fue operado de la rodilla derecha y estará fuera de la cancha por dos meses. Otro jugador que sigue en recuperación es Anderson Ordóñez.

Para este partido Liga recuperó a Christian Cruz que también estaba lesionado.

Los albos también podrán incluir en la defensa a Hernán Pellerano, aunque tiene pocos minutos de juego con el equipo.

Deportivo Cali, que viajó anoche a Ecuador, incluyó al arquero Camilo Vargas, quien salió golpeado en el partido que enfrentaron ante Millonarios y que terminó sin goles, pero será de la partida sin ningún problema.

Los ‘Azucareros’ tampoco tendrán en sus filas al defensa Juan Camilo Angulo, quien ya jugó la primera etapa de la Suramericana con otro equipo. La misma situación enfrenta Liga de Quito con el jugador Cristian Martínez.

En medio de las dificultades que tendrán los albos para medirse con el Cali, el guardameta Adrián Gabarinni destacó la experiencia de Pelusso en torneos internacionales.

El técnico de Deportivo Cali está “acostumbrado a que sus equipos nunca se encuentran desarmados”, comentó a la prensa Gabarinni.

El arquero ‘azucena’ agregó que el de hoy “es un partido importante para nosotros con un rival sumamente importante, de jerarquía”.

El encuentro será dirigido por el uruguayo Esteban Ostojich, que será asistido en las líneas por sus compatriotas Richard Trinidad y Carlos Pastorino.

Sopla el ‘Ciclón’

De otro lado, San Lorenzo, ganador de la primera Copa Suramericana en 2002, buscará superar un presente irregular ante el Nacional uruguayo, que viene de buena racha, en una atractiva serie de octavos de final del torneo regional que se iniciará hoy.

En la segunda ronda, el ‘Bolso’ eliminó al paraguayo Sol de América con un triunfo 1-0 en Montevideo tras igualar sin goles en la ida, en Asunción.

San Lorenzo, en cambio, perdió sus dos partidos con Deportes Temuco, por 2-1 en Buenos Aires y por 1-0 como visitante, pero se vio beneficiado por la inclusión indebida de un jugador en el equipo chileno en el partido de ida, en la capital argentina.

La Conmebol le dio la razón al ‘Ciclón’ y le dio ganado el primer partido por 3-0 y eso le permitió avanzar a octavos.

Más allá la forma poco auspiciosa de alcanzar esta tercera fase del torneo, San Lorenzo busca salir de un juego plagado de altibajos, como exhibió en la Superliga local donde el domingo empató 2-2 con Lanús después de tener dos goles de ventaja, lo que le significó algunos silbidos de su afición.

Curiosamente, en la primera fecha contra Tigre también igualó 2-2, pero en aquella ocasión el ‘Ciclón’ perdía 2-0 a los once minutos y luego empató.

“Hay que seguir trabajando, no es para tanto pero hay que mejorar. La gente (de San Lorenzo) se tiene que quedar tranquila, este plantel dará mucho más y va a pelear en todas las competencias. Hay que sacar la mala onda porque se viene un partido importante, sería positivo ganar ante un rival difícil”, declaró el entrenador Claudio Biaggio.

Acierta el técnico de San Lorenzo cuando habla de la dificultad que enfrentará el azulgrana, porque Nacional llegará entonado a Buenos Aires, por una racha de 12 partidos sin derrotas-la última fue contra Estudiantes de La Plata en la fase de grupos de la Copa Libertadores-, con cinco triunfos en fila y el primer puesto en solitario en el campeonato charrúa.

“Somos un gran equipo, eso se nota más cuando ganás, y nosotros estamos atravesando un muy buen momento en el torneo uruguayo y también en la Copa Sudamericana”, expresó el delantero argentino del ‘Bolso’ Gonzalo Bergessio, con pasado en San Lorenzo.

De hecho, ‘Lavandina’ Bergessio es, a los 34 años, la gran carta ofensiva de Nacional, club en el que lleva anotados 17 goles en 35 partidos.

El partido se jugará desde las 5:30 p.m. en el estadio Nuevo Gasómetro, y será arbitrado por el brasileño Raphael Claus.

El ganador de esta llave jugará en cuartos de final con el vencedor de la serie entre el  Fluminense y el ecuatoriano Deportivo Cuenca.