“Me sometí a una operación de revestimiento de la cadera ayer (lunes) por la mañana en Londres... Ahora me siento agotado y dolorido, pero espero que sea el final de mis dolores en la cadera”, escribió el tenista.
Durante la operación, que consistió en sustituir las dos superficies articuladas de la cadera sacrificando la menor cantidad posible de hueso, también se le colocó una placa de metal.
Murray pasó de nuevo por el quirófano, después de muchas dudas, es sobre todo para que pueda llevar una vida lo más normal posible, más que por tratar de regresar al primer nivel del tenis.
Vencedor de tres torneos del Grand Slam y vigente campeón olímpico, Murray, de 31 años, sufre de dolores de cadera desde hace un año y medio y en enero de 2018 ya tuvo que retirarse del Abierto de Australia para someterse a una primera operación.
Desde entonces apenas ha podido jugar y el mes pasado, tres días antes de comenzar el Abierto de Australia, Murray anunció en Melbourne que se retiraría de la competición en 2019 y que esperaba hacerlo en Wimbledon, torneo que ganó en 2013 y 2016./AFP