Si clubes deben pagar protocolo, será difícil que vuelva el fútbol: Barato | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Lunes, 1 de Junio de 2020
Alejandro Munévar*

La semana pasada se confirmó en la Dimayor lo que todos estaban esperando, que la intervención del senador Álvaro Uribe ante el Gobierno defendiendo al “muy golpeado” sector del fútbol diera frutos positivos. En este caso lograron el cometido, en contra de todo y de todos, consiguieron que el ministro del Deporte, Ernesto Lucena, aprobara junto al de Salud el regreso del fútbol.

Hasta el momento, el retorno del balompié es más de palabra que de cualquier otra cosa; sí, les puede doler a los licenciatarios, a los directivos, a los dueños del campeonato, pero es un regreso de palabra hasta que no se cumplan todas las normas exigidas por el Gobierno. Claro, sabiendo como son las cosas acá cualquier argumento se inventan y cualquier cosa aceptan, pero si son serios, que es lo que todos esperamos, deberían ser muy exigentes con las normas y el cumplimiento de las mismas para el regreso del fútbol.

Aunque este regreso se ve inminente según algunos sectores, no se puede ser ciego ante situaciones que evidentemente generan dudas. Empiezo, por ejemplo, por la discusión que tiene el canal que transmite el fútbol, que está básicamente exigiendo que se juegue un número excesivo de partidos en un corto plazo de tiempo, porque pues ellos pagaron por una cantidad específica de partidos y quieren tener eso, esta propuesta la secunda el patrocinador de la liga, claro, si lo vemos desde el punto de vista contractual tienen toda la razón; es más, de no cumplirse la cantidad de partidos pues tendrían que pagar por los que sí se jueguen.

Ahora bien, a esta ecuación le falta un factor, hablo de los jugadores, me imagino que a ellos no los han tenido en cuenta en estas decisiones; digo, no creo que les vaya a gustar mucho que los pongan a jugar cada tres días, que se los lleven qué sé yo, 3, 4 meses a una ciudad lejos de sus familias a jugar día tras día. Médicamente debe haber alguna contraindicación, seguramente, se van a sufrir muchas lesiones por el desgaste tan alto que van a presentar.

En una ciudad


Este tema, que se haga la liga en una sola ciudad, fue una idea que se les ocurrió a comienzos de la cuarentena y que en ese entonces (hace 75 días o más) parecía una locura, hoy es la gran solución, pero pregunto, ¿cuánto costaría tener a los 20 equipos en una sola ciudad?, claro, Medellín que tiene, digamos “la infraestructura” para hacerlo tendría que tomar muchísimas medidas y no creo que los paisas vayan a dejar que gente de todo el país llegue a su amado departamento llevando el Covid-19, porque por más que nadie este infectado seguramente ese sería un argumento de los paisas. Igual, según el protocolo de los 3 o 4 estadios de Antioquia solamente uno cumple con todas las características que se piden.

En el Eje Cafetero, en cambio, existen todas las posibilidades al menos en temas de estadios; seguramente, la capacidad hotelera de las tres grandes capitales estaría a tope, pero no habría mucho problema. Ahora repito, el problema es para los equipos o la Dimayor, al final esto no lo han hablado a profundidad, ¿de verdad se van a llevar a los jugadores de todos los equipos a una ciudad a concentrar durante más de dos meses seguidos, jugando al sol y al agua? En dónde están los señores de Acolfutpro que se les vio muy activos durante las primeras semanas del aislamiento poniendo tutelas a Santa Fe, al Cúcuta, entre otros, ahora sí no han salido a decir que esto “es inhumano”. Hace unas temporadas salieron a decir que no se podía jugar tanto, pero ahora no han salido a decir nada, ¿será que hace unas temporadas era malo jugar tanto y ahora es muy bueno?
Solamente pregunto, son preguntas que deberían hacerse los directivos del fútbol antes de pensar en la inmediatez de volver por la necesidad del dinero, al final créanme, vivir meses en otra ciudad en hoteles no es muy barato, digo no es barato para una persona que viaja sola ahora imagínense para los 30 o 40 personajes que viajarían en las expediciones futboleras.

Otros temas

Hay un asunto más que me llama la atención, esta semana charlando con Carlos Barato, presidente de Fortaleza un equipo de la segunda división, me dejó varios temas en la cabeza que como dicen por ahí serían una comidilla para los medios de comunicación. El primero de ellos, en la Dimayor pareciera que se hubieran olvidado de los clubes de la B, poco han hablado con ellos para consultarles sobre su opinión en todo el tema del proceso para que el fútbol vuelva, no saben cómo están haciendo las cosas o que piensan, si es probable o no el regreso a las canchas, tan si quiera a los entrenamientos, es evidente que a los clubes de la B los han relegado a un segundo plano, al final, pues estos no les generan ganancias, ni a los de la televisión, ni a los de la Dimayor; pero bueno, es la situación y los presidentes de los equipos de la B son conscientes de ello.

Pero el otro tema que me llamó más la atención es el siguiente: hablando de la cantidad de dinero que perciben los equipos por patrocinios y televisión, me dejó esta bomba, “si los equipos tenemos que pagar todo el esquema del protocolo realmente va a ser imposible el regreso del fútbol”.

¿Entienden ustedes el peso y la gravedad de estas declaraciones? Esto demuestra que la Dimayor, en efecto, no ha tenido en cuenta a todos los equipos para armar su dichoso protocolo, ojo que no creo que esto sea solamente una situación que viven los de la B, seguramente muchos equipos de la primera división del fútbol nacional deben tener el mismo problema, si son ellos los que tienen que pagar los protocolos para poder salir al campo, no van a tener con qué. El Cúcuta, por ejemplo, no sale de un enredo para meterse en otro.

Por su parte, el Pereira recién ascendido también tiene problemas económicos; no hablemos del Santa Fe o el América que están sacando jugadores porque no les pueden pagar o están pensando en cambiar de técnico porque no van a poder llegar a un acuerdo.
Antes de pensar en volver a las canchas la Dimayor debería darse una pasada por las sedes de los equipos para ver si tienen la capacidad, las condiciones de cumplir con el protocolo, porque por lo que dicen algunos directivos hay equipos que no tienen esa capacidad de tener sede propia y peor, no tienen la capacidad económica de pagar ellos mismos pruebas y protocolos anti Covid-19.