Para redondear su protagonismo en el legendario Tour de Francia, lo único que le hace falta a los ‘escarabajos’ colombianos es traer a casa la camiseta amarilla de Campeón.

Ya en los años 80, Lucho Herrera y Fabio Parra fueron grandes animadores, el boyacense alcanzó a subir al podio en 1988 y un año antes el cundinamarqués rondó la cuarta casilla.

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Sin embargo, las mayores figuraciones se alcanzaron en años recientes. En 2017, el antioqueño Rigoberto Urán mantuvo hasta el último tramo la ilusión e coronarse campeón, aunque debió conformarse con el subtítulo.

También, Nairo Quintana ha tenido a su alcance la corona en dos ocasiones, en 2013 y 2015 y en 2016 fue tercero.

Ahora, con un trío de ases, dos experimentados: Nauro y Rigo y uno que se está abriendo camino en la élite del ciclismo mundial: Egan Bernal, Colombia quiere hacer realidad el sueño amarillo. La tarea no será fácil de hacer porque aunque no estará el siempre gran favorito Chris Froome y tampoco Ton Dumoulan, el lote es selecto.

La topografía, en la que se destacan cinco llegadas en alto, puede convertirse en aliada de los ‘escarabajos’, quienes ya no temen, como antes, a las contrarreloj.

El primer gran desafío y en donde empezarán a buscar acomodo los candidatos al título, será en la quinta etapa, que incluye dos pasos elevados, aunque de segunda categoría.

Al día siguiente, (La Planche des Belles Filles), la exigencia ya es mayor, tres puertos de primera categoría y dos de segunda permitirán seleccionar el gran lote.

No menos dura es la octava fracción, en la que habrá media montaña, pero con cinco pasos de segunda categoría, que seguramente debilitarán las piernas de los competidores, para el día siguiente escalar un puerto de primera.

La jornada número 12 incluye dos premios elevados de primera categoría y en la 14, antes de subir al Tourmalet, que es de fuera de serie, habrá que escalar uno de primera categoría.

Ya en el tramo 15, esperan a los aspirantes a quedarse con la camiseta amarilla tres premios de primera categoría y uno de segunda, mientras que en la etapa 18 se encontrarán nuevamente con dos fuera de categoría y uno de primera.

Ya culminando el Tour, en la fracción 19, un paso de segunda, uno fuera de categoría y otro de primera, podrán indicar quién se encamina al paseo de la victoria, aunque antes de ellos, en el tramo 20, habrá que escalar uno de primera, otro de segunda y para rematar uno fuera de serie.

Si Nairo, Rigo y Egan capotean las etapas llanas sin ceder mucho tiempo, lo mismo que en las contrarreloj, dos en total, en las cimas francesas podrán inclinar la balanza a su favor, solo que tendrán que arriesgar, ser agresivos a la hora de atacar y no correr a la defensiva.

Parecidos pero diferentes

Varias cosas en común reúnen los tres ases colombianos que llegan a esta edición, la histórica competencia ciclística, de las tres grandes, la más añeja y en la que el grupo de aspirantes al título que ostenta Geraint Thomas, corredor del Ineos, ronda los 12.

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Nairo es un escalador puro que ha ido corrigiendo deficiencias en las jornadas a cronómetro, pero a quien sus rivales no descuidan y, por el contrario, siempre intentan desgastar.

Rigo es un corredor que se defiende en la alta montaña pero no es un escalador eximio y que gracias a su experiencia, se las ingenia para no ceder demasiado tiempo en las etapas que incluyen pasos elevados de fuera de categoría.

Y, Egan es de los tres, el más completo. Gran escalador, se defiende muy bien en el descenso gracias a su paso por el ciclomontañismo, aunque le falta experiencia, factor que ha sabido manejar y por ello ha triunfado en carreras de una semana que son muy exigentes y ante rivales de mucho peso.

Al Tour de Francia, cada uno de los ‘escarabajos’ llega por su lado, a defender los intereses del Movistar, el EF y el Ineos, pero el objetivo es común: ganar la camiseta amarilla para su país, para la Colombia que los vio nacer.

Rivales a vencer

En el Tour siempre emerge alguna figura. Para no ir tan lejos, en 2013 Nairo era un señor desconocido y terminó siendo el gran protagonista y haciendo sufrir a Froome.

Sin embargo, a la hora de echarle un vistazo al grupo de rivales director del trío de ases colombiano, hay que partir de la base de los que, justamente, llegan con el rótulo de favoritos.

Sin Froome ni Dumoulan, en consideración como el primer llamado a quedarse con la victoria final en los Campos Elíseos tras 25 días de competencia, es Geraint Thomas.

El galés, que es el defensor del título y comparte el liderato de su equipo con Bernal, ha vivido una temporada de resultados discretos, lejos de sus grandes actuaciones previas del año pasado.

Luego aparecen Jakob Fuglsang, cuya mejor clasificación es un 7º puesto, asegura buscar “un top 5 y, con una pequeña ayuda, el podio”.

También Vincenzo Nibali. El 'Tiburón', uno de los dos exganadores presentes en esta edición (junto a Geraint Thomas), tiene muchas virtudes. Pero para el maestro siciliano, que peleó en la primavera boreal durante todo el Giro de Italia (2º), todo se resume en la siguiente pregunta: ¿Cómo se ha recuperado de la ronda italiana?

De la misma manera, Peter Sagan, quien llega con solo tres victorias este año, pero es el máximo favorito para conquistar de nuevo el maillot verde de la clasificación por puntos y por qué no, la corona.

Julian Alaphilippe, número uno mundial, uno de los hombres fuertes del pasado Tour (dos victorias de etapa y el maillot de la montaña). El francés, embalado en la primavera, dispone de varias cartas por sus cualidades y su sentido del ataque. ¿Vestirá el amarillo en la primera semana?

Wout Van Aert, cuyo debut es muy esperado. El belga podría ser uno de los hombres a tener en cuenta en la primera semana si su equipo le da margen entre los esprints de Groenewegen y la clasificación general de Steven Kruijswijk.

Y, Warren Barguil, quien llega impulsado ahora por su título de campeón de Francia.