Con sorpresa, pero teniendo en cuenta el impacto de la inflación y con el objetivo de frenar el incremento de la inflación, la Junta Directiva del Banco de la República, aumentó 1,5% las tasas de interés para dejarlas en 7,5%.

Esta fue una decisión sin precedentes en los últimos años, ya que casi por unanimidad los mercados esperaban aumento entre 1% y 1,25%, para darle un mayor margen de otro aumento para julio en la política monetaria del Emisor.

La medida fue tomada de forma unánime por los miembros de la Junta Directiva. En un comunicado, los directivos señalaron que “la decisión adoptada en el día de hoy es compatible con la fortaleza que viene mostrando la actividad económica en los últimos trimestres, y contribuirá a que la política monetaria se posicione más rápidamente en una senda que reduzca la inflación y que converja a la meta en el mediano plazo. En adelante, el ritmo de ajuste de la política monetaria dependerá de la nueva información disponible”.

El gerente general del banco, Leonardo Villar, y el ministro de Hacienda y Crédito Público, José Manuel Restrepo, aseguraron en rueda de prensa, que la inflación que padece Colombia la padecen también la mayoría de los países en el mundo.

“Este aumento en la tasa de interés fuerte y sin antecedentes en la historia reciente del país, está dirigido a tratar de que las expectativas de inflación se ajusten más rápidamente hacia la meta y eso nos ayude a evitar la necesidad de aumentos excesivos en esta tasa en el futuro”, dijo Villar. El rango meta de la inflación en Colombia es de entre 2% y 4% anual.

¿Límites?

Indicó el directivo que “no sabría decir cuál va a ser el punto final de esta senda alcista, pero sí podría decir que busca que ese punto final llegue más pronto y llegue a un nivel más bajo si seguimos difiriendo las decisiones”.

De otro lado, Villar indicó que el Banco de la República es consciente de la persistencia del choque inflacionario por el que atraviesa Colombia y el mundo.

Sobre esto, el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, señaló que en un rango de entre dos y tres meses, debe comenzar un proceso de reducción de la inflación anualizada.

Por otra parte, la Junta del emisor destacó que el crecimiento económico ha sorprendido significativamente al alza, lo cual se viene reflejando en diversos indicadores como las mayores tasas de cartera crediticia.

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Crecimiento

Este panorama también fue destacado por el equipo técnico del Banco central, que revisó al alza su previsión del PIB para 2022 de 5% a 6,3%.

El ministro Restrepo destacó, además, que la decisión de aumentar las tasas a 7,50% reconoce un aumento importante en la recuperación de empleo, que se refleja en los datos que el Dane entregó más temprano.

La entidad estadística confirmó que la tasa de desocupación bajó a 10,6%, en parte por la creación reciente de 2,2 millones de puestos adicionales.

El MinHacienda indicó que, si bien se hizo un incremento de gran calado en los tipos, “esto no implica que, de aquí en adelante, habrá un aumento similar en el ritmo de la política de normalización monetaria”.

En su lugar, dijo que, cada mes, se revisarán los indicadores macroeconómicos y financieros de cara a futuras decisiones de tasas de interés.

En tanto, Villar fue claro en decir que “muy probablemente” el proceso de ajuste que se viene haciendo no ha terminado.

El gerente del Banco de la República indicó que no se tiene previsto cambiar el calendario de tasas de interés, con el cual se toman decisiones ocho veces al año.