LA CORPORACIÓN Fomentamos a través del programa Círculos Solidarios, respaldó a unidades productivas de trabajadores con 23.985 microcréditos. Gracias a las alianzas con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, a través de iNNpulsa Colombia, el sector cooperativo por medio de Confiar, Cotrafa, Cootramed, Cobelén, Vivir Los Olivos, Juriscoop entre otros, la Gobernación del Chocó y las alcaldías de Medellín, Envigado, Rionegro, Yumbo y Caldas, se ha logrado expandir la cobertura del programa en el territorio nacional haciendo presencia en 13 departamentos del país como La Guajira, Chocó, Cauca, Cundinamarca, Antioquia, Boyacá, Valle Del Cauca, Bolívar, Tolima, Risaralda, Caldas, Quindío y Magdalena.
“En el año 2024 cerramos con 1.517 Círculos Solidarios conformados por personas del sector informal de la economía, personas que deben su sustento a pequeñas unidades productivas o de subsistencia que tradicionalmente han tenido que acudir a sistemas de crédito ilegales como pagadiarios o gota a gota. La Corporación trabaja para transformar la realidad de las comunidades más vulnerables, otorgándoles pequeños créditos, enseñándoles a ahorrar y capacitándolos para que crezcan gradualmente”, expresó Carlos Eduardo Mira Duque, director de la Corporación Fomentamos.
A través del programa de Círculos Solidarios, se vienen abriendo oportunidades para trabajadores de la economía popular, especialmente aquellos que tienen reportes en centrales de riesgo y están excluidos del sistema financiero tradicional. En particular, el programa ha impactado a más de 18.133 mujeres en todo el país, quienes lideran unidades productivas en sectores como el comercio ambulante, servicios, y actividades clave para la economía del “rebusque”. Gracias a este apoyo, estas mujeres no solo generan ingresos para su sustento y el de sus familias, sino que también fortalecen sus emprendimientos y contribuyen al desarrollo económico de sus comunidades.
En 2024, se desembolsaron $54.384 millones a través de 85.407 operaciones de crédito, beneficiando principalmente a trabajadores de los estratos 1, 2 y 3, muchos de ellos vinculados a la economía informal. Más allá del acceso al crédito, el ahorro ha sido clave para fortalecer la estabilidad financiera de estos trabajadores, alcanzando $7.498 millones. Este hábito es fundamental para que mujeres y hombres del sector popular puedan afrontar imprevistos, invertir en sus unidades productivas y construir un futuro con mayor seguridad económica.