En contraste con un panorama “complicado” para América Latina, el Banco Mundial destacó las previsiones para Colombia, donde la institución prevé una “sólida expansión” de 3,5%.
El optimista escenario se dio a conocer en el informe del Banco Mundial en el que recortó sus pronósticos para la economía global en 2019 por las tensiones comerciales, la inquietud en los mercados financieros y una desaceleración más marcada de lo previsto en varias economías avanzadas, una rebaja de la cual no está exenta Latinoamérica.
Al desglosar el informe de Global Economic Prospects: Heightened Tensions, Subdued Investment (Perspectivas económicas mundiales: mayores tensiones, escasas inversiones) de junio de 2019, la Casa de Nariño reseñó cómo el Banco Mundial estimó que el Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia tendrá un mejor desempeño en 2019.
Tras señalar que el 3,5% previsto es superior al 3,3% que había proyectado anteriormente, la Presidencia rescató del informe que el crecimiento de este año estaría casi un punto por encima de la economía del mundo entero, estimado en 2,6%, y también se destacaría en Latinoamérica, pues el crecimiento de la región se prevé que sea de 1,7%.
El Banco Mundial subrayó que los datos recientes de la economía colombiana “indican una gradual expansión”.
“El crecimiento en Colombia se prevé también que siga fortaleciéndose. Las reformas a los impuestos corporativos, junto a la implementación de proyectos de infraestructura vial a gran escala sustentarán una recuperación en el crecimiento de la inversión”, expuso el Banco Mundial.
Para 2020 y 2021, el organismo estima que el PIB de Colombia podría crecer un 3,7% durante ambos periodos.
“Condiciones complicadas”
La institución espera que el crecimiento de América Latina y el Caribe, exceptuando Venezuela, sea de 1,7% en 2019, un recorte frente al pronóstico de una expansión de 2,1% hecha en enero.
Según el Banco, la reducción en América Latina “refleja las condiciones complicadas que enfrentan varias de las grandes economías de la región”.
Para Brasil el Banco Mundial destacó la mejora de las condiciones del mercado de trabajo y del crédito, pero dijo que los indicadores de la actividad siguen siendo débiles, con una expansión de 1,5%, que implica un recorte de 0,7 puntos.
Con respecto a México, la entidad pronosticó una expansión de 1,7%, 0,3 puntos menos de lo pronosticado en enero.
Por su parte, Argentina sigue en recesión, con una contracción prevista de 1,2%, aunque esta cifra es 0,5 puntos mejor que lo que se pensaba en enero.
Debido a la falta de datos, el Banco Mundial dijo que dejó de emitir proyecciones sobre Venezuela y que ha eliminado al país de los promedios regionales que antes integraba el país, sumido en una aguda crisis política, económica e institucional.
Baja significativa
A nivel global, la institución dijo que espera una recuperación modesta en los próximos dos años, según los datos de sus pronósticos semestrales, que cuentan con que haya una mejora en el panorama global para entonces.
Según las proyecciones de la institución, el crecimiento mundial va a desacelerarse a 2,6% este año, 0,3 puntos por debajo que lo proyectado en enero, para alcanzar un 2,7% en 2020, un nivel también 0,1 puntos por debajo de lo calculado por la institución en su informe emitido a principios de este año.
El Banco Mundial dejó sin cambios las previsiones de crecimiento para Estados Unidos, proyectando una expansión de 2,5% este año pero recortó drásticamente las de la zona euro, a un 1,2%, una reducción de 0,4 puntos.
Pero el crecimiento global podría verse aún más lastrado ya que estas previsiones fueron elaboradas antes del anuncio hecho por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles a las importaciones provenientes de México.
Estas nuevas predicciones también son más pesimistas que las expuestas por el Fondo Monetario Internacional en su último informe sobre la economía mundial publicado en abril, en el que advirtió de la desaceleración y los temores sobre el futuro del comercio.
David Malpass, nuevo presidente del Banco Mundial y exdelegado del gobierno de Trump en las negociaciones comerciales con China, dijo a los periodistas que el crecimiento es "frágil" y que el panorama hace que peligre la lucha contra la pobreza en el mundo.
"En la actualidad, el impulso económico sigue siendo débil, en tanto que los elevados niveles de deuda y el escaso crecimiento de la inversión en las economías en desarrollo están impidiendo a los países lograr su potencial", dijo Malpass.