Colombia tiene suficiente gas para soportar impacto del fenómeno del Niño | El Nuevo Siglo
EN LA Bahía de Cartagena, cerca de Barú, está la planta de regasificación. /Promigas
Martes, 6 de Febrero de 2024
Redacción Economía

SI SE presenta un desabastecimiento por el impacto del fenómeno del Niño, Colombia tendría la suficiente capacidad para incrementar la producción de gas sin tener la necesidad de importar ese combustible.

Así lo expuso la Asociación Colombiana de Ingenieros de Petróleos (Acipet), en un estudio que entregó al Gobierno y al resaltar inconveniencia de comprar gas natural de Venezuela por medio del gasoducto Antonio Ricaurte.

Ante la arremetida del Niño, se estima que Colombia tendrá un aumento temporal de la demanda de gas para generar electricidad que compense la baja de generación de las hidroeléctricas como consecuencia de la sequía.

Señala el informe que la relación actual de volumen de producción diaria promedio de gas frente a la demanda en condiciones climáticas normales es positiva del orden de 1,25 veces oferta/demanda.

Indica que en un escenario climático normal la demanda estimada en 2023 es de 883 millones de pies cúbicos por día (mpcd). La producción promedio está entre los 1.100 millones a 1.120 mpcd, y la demanda se puede cubrir quedando un margen disponible superior a los 200 mpcd.

Señala la Asociación que en un escenario temporal crítico con fenómeno del Niño la demanda de gas podría subir a 1.333 mpcd, con un déficit temporal de 233 respecto a la producción promedio de 1.100 millones.

Regasificación

Dice Acipet que este volumen adicional se puede obtener por medio de la Terminal de regasificación ya instalada y en operación en Cartagena. Destaca que esta Terminal tiene las ventajas de producir 533 millones, con esta capacidad se cubre aproximadamente más del 5 0% de la demanda nacional.

Además, el precio de gas importado por esta Terminal de regasificación está en el orden de US$ 6 / millón BTU (unidad internacional que mide la cantidad de gas que se quema en una hora y multiplicando ese número por el poder calorífico) para mediados de año 2023. Sostiene el gremio de los ingenieros que faltaría conocer el detalle del precio contratado hacia el futuro al menos en un término de 5 años más y compararlo con el precio de gas a importar por el gasoducto Antonio Ricaurte.

Según el comunicado de Ecopetrol, el inicio de la operación está previsto para diciembre 2024 para iniciar la importación de gas desde Venezuela. En estas condiciones y de acuerdo con los pronósticos climáticos más recientes del Idema, el fenómeno del Niño ya habrá pasado, y en teoría, según lo descrito anteriormente no se requerirá importar gas.

Indica el informe que, recientemente han entrado al Sistema Interconectado (eléctrico) Nacional (SIN) las unidades 3 y 4 de la hidroeléctrica de Hidroituango (+600 MW) en su primera fase y la Termocandelaria en ciclo combinado (adiciona 241 MW con el mismo consumo de gas) y entraran alrededor de 1.000 MW de plantas con fuentes renovables, lo cual en total adicionara un aproximado de 10% a la capacidad instalada de generación de energía eléctrica nacional, sin uso de gas combustible.

Lo anterior compensaría la declinación de producción o aumento de demanda de gas para los años próximos hasta tener el desarrollo de los nuevos descubrimientos en tierra y los bloques costa afuera.

Inconveniencia

En el análisis, Acipet indica al Ejecutivo que la importación de gas por el gasoducto Antonio Ricaurte (A.R), presenta muchas dudas en cuanto a su conveniencia para nuestro país.

Las dudas más notorias están relacionadas con i) el precio de venta de gas puesto en el terminal de Ballena en la costa norte colombiana; ii) el plazo del contrato; iii) los volúmenes de gas por día garantizados en el contrato; iv) la calidad del gas que nos podría suministrar Venezuela; v) el estado de las facilidades de producción y transporte.

Igualmente, el precio de venta del gas de Venezuela no debería ser mayor que el de importación por la Terminal de Regasificación de Cartagena. Debería existir un margen amplio considerando que los precios del gas a futuro bajarán por la mayor oferta que se pronostica a nivel mundial y la terminal podría conseguir estos precios bajos debido a la capacidad de negociación con los proveedores del mercado.