Con la última cifra de inflación revelada por el DANE, la carestía de los precios es uno de los temas que más preocupa tanto a expertos como al grueso de la población.

Sin duda alguna, los efectos regresivos de un Índice de Precios al Consumidor (IPC) alto pone en riesgo la estabilidad macroeconómica de la nación y en aprietos el bolsillo de los más pobres. Es por eso que la Junta Directiva del Banco de la República tomó la decisión de subir sus tipos a 6% durante su última reunión.

El alza de la tasa de interés de referencia tiene como objetivo primario frenar el consumo, lo que sin duda ayudaría a ralentizar el empuje inflacionario.

Los intereses

Sin embargo, existen opiniones divididas al respecto.

Para Luis Fernando Mejía, director ejecutivo de Fedesarrollo, el dato de inflación “le generará al Banco de la República la necesidad de aumentar más rápidamente sus tasas de interés porque supera las expectativas del mercado”, sostuvo a EL NUEVO SIGLO.

Según el director del centro de pensamiento, uno de los factores determinantes ha sido el gasto de los colombianos. “El consumo interno, indudablemente es la razón por la cual el Banco de la República tiene que subir las tasas de interés, si esto fuera un problema únicamente de oferta la subida de tasas de interés no tendría ningún sentido”, explicó.

Mejía añade que el consumo de los hogares ha crecido muy rápidamente, “el año pasado lo hizo por encima del 14% en términos reales, casi un 20% en términos nominales y eso indica que una parte importante de lo que se está viendo tiene que ver justamente con ese crecimiento tan rápido en el gasto de los hogares”.

La oferta

En contraparte, Camilo Herrera, director de la firma Raddar, dijo a este medio que es justamente la oferta, más que el consumo, la que está impulsando el aumento de precios.

“No es el consumo el que está jalonando la inflación, sino la baja oferta de productos, entre otras variables, que pueden estar tirando de la inflación. Es decir, no es que sea la mayor demanda de los hogares, sino el exceso de oferta por parte de la industria”, señala.  

“La gente sigue comprando como siempre ha comprado, obviamente un poco más porque hay más gente, hay otras condiciones. Pero, ¿qué pasa? Es que la oferta no ha logrado de una u otra manera suplir esa demanda por todos los problemas logísticos que hay en el mundo”, complementa Herrera.

Sin embargo, Mejía señala que no solo es el consumo; “la inversión privada también crece, así que se suman los dos elementos (consumo e inversión), los factores de oferta externos, relacionados con los problemas en las cadenas de suministro, el aumento de los costos de transporte, el conflicto de Ucrania-Rusia, lo que está pasando ahora en China, pero también el componente demanda, que por supuesto también está añadiendo a estas presiones el aumento de los precios de los bienes y servicios.

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Medidas antiinflacionarias

Estas posiciones contrarias tienen un punto en común: los efectos externos ejercen una gran influencia y se deben tomar medidas que ayuden a controlar los precios.

En ese sentido, Mejía cree que el aumento en la tasa de interés sí es necesario, y que las decisiones que está tomando el Gobierno deben mantenerse y fortalecerse, ya que la presión de IPC sigue aumentado.

“El Banco de la República seguramente aumentará las expectativas de inflación para este año, estaban en 7% para diciembre, antes del dato que salió para el mes de abril, y es muy probable que las expectativas continúen, a veces llegan a niveles cercanos al 8% para diciembre”, señaló Mejía.

Para ello, “obviamente un elemento fundamental tiene que ver con el aumento de las tasas de interés del Banco de la República, que actualmente están en un 6%, muy por debajo de lo que serán esas expectativas de inflación para este año”, señala.

Los aranceles

Entre otras medidas enfatiza en buscar la disminución de precios. “También se debe profundizar en las medidas de reducción de los aranceles de los productos utilizados como insumos, en los procesos de producción. En Colombia ya se hizo algo de esto por el lado de los fertilizantes, creo que se puede hacer una revisión más amplia y además dejar esas medidas de manera más permanente, porque creo que no tiene mucho sentido que el país continúe encareciendo la producción de alimentos a través de aranceles, por ejemplo la importación de fertilizantes”, señaló el director de Fedesarrollo.

A su vez, el presidente de Raddar dice que “el Gobierno tomó tres medidas para contener la inflación: subir tasas de interés del Banco de la República, reducir aranceles desde el Ministerio de Comercio y no subir el precio de la gasolina, pese a que aumentaron los precios del petróleo; entonces claramente con eso se está evitando que la inflación suba más. O sea, si el Gobierno no estuviera haciendo lo que está haciendo, la inflación ya podría estar por encima inclusive del 20% en Colombia, solamente por el tema de combustible”, puntualizó.